A lo largo de nuestra vida, es muy probable que en alguno de los viajes de avión que hayamos realizado, hacer escala resultase una obligación para llegar a nuestro destino. Lo que quizá desconozcamos es que muchas personas realizan una práctica bastante engañosa que las aerolíneas no piensan consentir más: hablamos de los vuelos con ciudad oculta.
Depende de nuestro destino final, puede ser que tengamos que realizar alguna escala.
Así pues, este tipo de vuelos, conocidos en inglés como Hidden city o skiplagging, son todos aquellos que las personas que lo contratan compran un billete con escalas, para finalizar su viaje antes y nunca llegar a la ciudad final de destino. El objetivo de realizar este tipo de viajes es que suele salir mucho más económico.
La práctica ha ido en aumento con el paso del timepo
A lo largo de los años, las aerolíneas decidieron no imponer ninguna sanción o medida al respecto ante esta práctica, debido a que pocas personas la realizaban, pero que según la BBC ha ido en aumento. Debido a ello, aerolíneas como Lufthansa han decidido llevar el caso a los tribunales.
John Grant, de JG Aviation Consultants, ha asegurado que “Durante muchos años, las aerolíneas hicieron la vista gorda a esta práctica que usaba un pequeño pero creciente grupo de viajeros inteligentes que tiraban el último tramo del viaje a la basura. Las aerolíneas aceptaron la práctica ya que llenaban los asientos”.
Webs y foros especializados en Hidden city
Esta práctica empezó a generar adeptos rápidamente, llegando incluso a crearse portales web y foros como por ejemplo Skiplagged, en que los viajeros se ayudan entre ellos para encontrar viajes con escala y que el destino que queramos ir salga mucho más barato.
El portal de Skiplagged con todas las ofertas de vuelos disponibles/ Skiplagged
Webs como Skiplagged ya ha sido demandada por compañías como por ejemplo United Airlines y Orbitz. Lufthansa, por otra parte, decidió demandar a un viajero en concreto que había realizado esta práctica durante tiempo. Pese a ello, las compañías no lograron ganar en los tribunales.
United Airlines llegó a demandar a los creadores de Skiplagged.
Pese a la insistencia de las aerolíneas, que argumentan que con esta práctica llegan a perder dinero, debido a que los viajeros llegan a su destino en viajes cuyo precio sería realmente mucho más caro, la justicia no ha visto nada punible. Así pues, y por el momento, los viajeros pueden seguir realizando esta pequeña triquiñuela, que puede llegar a suponer un ahorro de 100 euros por billete.

