Conocer cómo piensan y actúan nuestros perros es la base de una convivencia armoniosa y segura. Cada ladrido, gesto o movimiento de cola transmite información sobre sus emociones, necesidades y límites. Ignorar estas señales puede derivar en conflictos, estrés para el animal y frustración para el propietario.
Federica Gassauer es una educadora canina profesional argentina radicada en Barcelona, especializada en el adiestramiento en positivo y la modificación de conductas caninas. En una de sus publicaciones más recientes, ha reflexionado sobre el significado que esconde que nuestro perro nos siga por toda la casa durante todo el día.
Más que un reflejo aprendido: así es como tu perro realmente empatiza contigo
¿Qué esconde el comportamiento de nuestro perro?
Vínculo y apego. Los perros son animales gregarios y sociales y suelen elegir a una persona como su figura de referencia. Seguirte es su manera de estar cerca de ti y sentirse seguro.
Curiosidad y rutina. Muchos perros quieren saber qué hace su tutor en cada momento: si vas a la cocina, puede esperar comida; si vas a la puerta, puede que salgan de paseo.
Un perro recibiendo un abrazo
Necesidad de compañía. Algunos perros simplemente disfrutan de tu presencia y no quieren perderse nada.
Refuerzo aprendido. Si en varias ocasiones al seguirte ha obtenido atención, caricias o comida, aprende que ir detrás de ti trae cosas buenas.
Ansiedad por separación. Si tu perro no solo te sigue, sino que se estresa cuando no puede hacerlo (llora, rasca puertas, jadea, destruye cosas), podría estar mostrando señales de ansiedad.
¿Cómo diferenciar un comportamiento normal de uno problemático?
Atención. La experta señala que la clave es que nos fijemos en cómo reacciona nuestro perro cuando no puede acceder a ti:
- Si espera tranquilo. Es algo completamente normal que no requiere atención.
- Si entra en pánico. conviene trabajarlo con pautas de independencia y seguridad junto a un educador canino

