Cuando se piensa en los entrenamientos que forjaron al Manchester United que dominó la Premier League y Europa, uno se imagina sesiones exhaustivas en el campo de Carrington. Sin embargo, Wayne Rooney ha revelado que una parte crucial de la preparación ocurría en un espacio mucho más insospechado: los asientos del avión o del autobús del equipo, con una PSP en las manos.
El jugador asegura que el videojuego SOCOM, un título táctico de operaciones especiales, fue un instrumento accidental pero tremendamente efectivo para mejorar la química del equipo fuera del terreno de juego.
El juego que unió al vestuario
Durante una entrevista, Rooney compartió esta anécdota con convicción: “Esta es una historia real. En el Manchester United, realmente creo que una gran parte de nuestro éxito fue jugar con la PSP”.
SOCOM, el videojuego del que habla Rooney
El juego en cuestión era SOCOM: U.S. Navy SEALs, un título de disparos táctico que requiere de una gran coordinación y comunicación entre los jugadores. Rooney detallaba cómo este pasatiempo se convirtió en una rutina de grupo: “Lo solíamos jugar en el avión, en el autobús del equipo. Y jugábamos 5 contra 5”.
El equipo virtual lo formaban algunas de las estrellas del club: “Estábamos yo, Rio [Ferdinand], Michael Carrick, John O'Shea y Wes Brown”. Estas partidas de cinco contra cinco se transformaron en algo más que un simple entretenimiento.
Wayne Rooney en el Manchester United
Comunicación y táctica
El entrenamiento invisible. La grandeza de SOCOM como herramienta de cohesión residía en su mecánica. Rooney explicó que “tienes que hablar, tienes que estar tácticamente en lo correcto y tienes que ir a revivir a la gente cuando la matan”. Esta necesidad constante de comunicarse, dar instrucciones y actuar como una unidad para lograr un objetivo común era un reflejo directo de lo que necesitaban en el campo de fútbol.
El exdelantero llegó a afirmar que “cómo jugabas ese juego en realidad reflejaba a ese jugador, cómo juegan al fútbol”. Era un espejo virtual de sus personalidades futbolísticas. Para ilustrarlo, puso el ejemplo de su compañero Michael Carrick: “Era una locura. Michael Carrick era ese astuto y tranquilo, ya sabes, estabas tumbado escondido y solo escuchabas una granadita rebotando cerca de ti que él te había lanzado”. La descripción coincide perfectamente con el estilo de juego inteligente, pausado y visionario del centrocampista.
Rooney y Michael Carrick celebrando un título
Al ser preguntado por su propio estilo en el videojuego, la respuesta de Rooney fue inmediata y no dejó lugar a dudas, siendo un perfecto paralelismo de su filosofía en el terreno de juego: “Bueno, yo me entregaba por completo. Iba directo, en la primera línea de trincheras, allá dentro”.
Esta actitud de ataque frontal y sin complejos era la misma que caracterizó su carrera como delantero: potente, decidido y siempre buscando el enfrentamiento directo con la defensa rival.
