En la sociedad actual, el ordenador se mantiene como una herramienta imprescindible, tanto para estudiar como para trabajar. Su versatilidad permite acceder a información, comunicarse, crear y organizar tareas de manera eficiente, convirtiéndose en un aliado cotidiano en la vida académica y profesional. A medida que la digitalización avanza, quienes dominan su uso obtienen ventajas claras en productividad y aprendizaje, mientras que la falta de acceso o de conocimientos puede aumentar la brecha digital. Así, no es solo un aparato tecnológico, sino un instrumento que condiciona oportunidades, habilidades y desarrollo personal en un mundo cada vez más interconectado.
El experto en informática y hardware, Rincón de Varo, ha advertido del gran problema que deben afrontar tanto pequeños como grandes usuarios en los próximos meses. El repunte de precios en los componentes hará que sea cada vez más inasumible adquirir piezas críticas como Memoria RAM o discos SSD: “Es una barbaridad”, comenta sorprendido.
Ordenador
Los usuarios finales pagan las consecuencias de una carrera tecnológica
Motivo. La creciente demanda de componentes de las compañías especializadas en inteligencia artificial está provocando un agotamiento y repunte de precios sin precedentes: “El año 2026 será un desastre para los usuarios de PC, consolas y todo lo que tenga en su interior memoria RAM o almacenamiento. ¿Por qué? Porque los centros de datos para inteligencia artificial están absorbiendo todo el stock”, explica.
Precios. El experto explica que el precio de la memoria RAM se ha multiplicado por seis en apenas un mes: “Lejos de solucionarse, ya nos avisan de que toda al capacidad de producción de 2026 ha sido asignada”, advierte. Esto hará el que poco stock que pueda quedar tenga un precio desorbitado.
Inteligencia Artificial
Inteligencia artificial. Los grandes modelos de IA exigen volúmenes inmensos de RAM y almacenamiento ultrarrápido para funcionar a pleno rendimiento, y esa demanda está reconfigurando por completo la cadena tecnológica. Cada vez más capacidad de producción se destina a centros de datos y laboratorios de entrenamiento, dejando menos margen para el mercado de consumo. Esta presión altera precios, disponibilidad y prioridades industriales, evidenciando cómo la expansión de la inteligencia artificial no solo transforma procesos y servicios, sino también la infraestructura básica que sostiene todo el ecosistema digital.
Afectación. Esta problemática podría afectar también al mercado de las tarjetas gráficas. Las GPU's modernas utilizan VRAM y podría provocar cancelaciones o retrasos en el lanzamiento de las nuevas series, que podrían terminar lanzándose en 2027 o 2028.
Memoria RAM
Datos. Los fabricantes priorizan contratos millonarios con centros de datos, lo que deja menos unidades para el mercado doméstico y dispara los precios. Como resultado, la DRAM ha llegado a subir más de un 170 % interanual y los SSD empresariales alrededor de un 25 %, mientras que los módulos destinados a PC y portátiles se encarecen e incluso sufren retrasos de suministro. Todo ello dibuja un escenario donde los usuarios finales pagan las consecuencias de una carrera tecnológica que consume más hardware del que la industria es capaz de producir.
Recomendación. El consumidor medio y los pequeños negocios suelen aprovechar los primeros días del año para renovar sus equipos. Lo ideal para evitar pagar más por lo mismo dentro de pocos meses es comprar ahora lo que necesitemos. Para consumidores, fabricantes y desarrolladores, este escenario obliga a planificar con cautela y a asumir que la recuperación no será inmediata. La incertidumbre en torno al hardware revela, una vez más, hasta qué punto la tecnología depende de equilibrios delicados que pueden romperse con facilidad.

