¿Cómo saber quiénes son realmente tus amigos? Para el empresario y experto en crecimiento empresarial Alex Hormozi, la respuesta es tan clara como reveladora: “La mejor manera de identificar a un buen amigo es cómo reacciona cuando tú triunfas”. Así lo expresó en uno de sus vídeos virales en TikTok, donde millones de personas siguen sus consejos sobre mentalidad, éxito y emprendimiento.
Hormozi, autor del libro $100M Offers y fundador de Acquisition.com, advierte que la victoria no solo revela nuestro esfuerzo y trabajo, sino también la verdadera naturaleza de quienes nos rodean.
Los amigos reales celebran tu éxito
Según Hormozi, hay una señal infalible para saber si alguien es un amigo de verdad: su actitud cuando las cosas te empiezan a ir bien. “Los amigos reales quieren que ganes, y una vez que empiezas a ganar, te das cuenta de lo raros que son los amigos reales”, afirma el emprendedor.

Un grupo de amigos
Lejos de lo que muchos piensan, no es en los momentos difíciles donde más fácilmente se detecta una amistad sincera, sino cuando uno comienza a triunfar. Y es que no todo el mundo es capaz de alegrarse genuinamente por los logros ajenos.
Cuidado con los falsos aliados. Hormozi va más allá y lanza una advertencia directa: “Los amigos malos son 100 veces más peligrosos que los enemigos”. Su mensaje apunta a esas relaciones tóxicas disfrazadas de cercanía y apoyo que, en realidad, esconden envidia, competencia silenciosa o incluso deseos de fracaso.

Captura de vídeo
“Es mejor estar solo que con gente que secretamente te ayuda a fallar”, sentencia. Esta reflexión se alinea con muchas de las ideas que defiende habitualmente en sus intervenciones: la importancia de rodearse de personas que aporten valor, honestidad y apoyo real, especialmente en el ámbito del crecimiento personal y profesional.
El discurso de Hormozi conecta con una sensación cada vez más extendida en la sociedad actual: la dificultad para encontrar relaciones auténticas. En un mundo dominado por las apariencias, la comparación constante en redes sociales y la hiperconectividad, distinguir entre apoyo real y fachada es más difícil que nunca.