Mario Sánchez Rosagro, tecnólogo de alimentos y divulgador científico tras la cuenta ‘Lo de comer’, ha revolucionado TikTok explicando por qué guardar determinadas frutas en la nevera puede arruinar por completo su sabor. En un vídeo, el experto detalla cuáles son las llamadas frutas climatéricas y por qué es mejor no refrigerarlas… al menos al principio.
¿Qué son las frutas climatéricas?
Sánchez explica que frutas como los plátanos, peras, manzanas, tomates y aguacates son climatéricas, lo que significa que siguen madurando después de haber sido recolectadas. Esto se debe a que generan etileno, un gas natural que actúa como hormona vegetal, acelerando su proceso de maduración.
Hay que comprobar el estado de frutas y verduras
“Si las metemos en la nevera, su sabor se va a reducir bastante”, explica Mario, quien aclara que el frío detiene o ralentiza este proceso, afectando al dulzor y la textura de estas frutas.
¿Entonces nunca deben ir a la nevera?
La respuesta es matizada. “En épocas calurosas, guardar la fruta en la nevera se convierte casi en una obligación, sobre todo para evitar que se eche a perder”, afirma el experto. Así, aunque lo ideal sería conservarlas fuera del frigorífico durante su proceso de maduración, no pasa nada si las metemos en frío para frenar su deterioro una vez están en su punto óptimo.
Captura de vídeo
Además, Mario reconoce que algunas personas prefieren la fruta fría, lo cual es válido, pero recuerda: “Una cosa es lo recomendable desde el punto de vista de la conservación y otra son las preferencias personales”.
Frutas climatéricas vs. No climatéricas
Para ayudar a entender mejor cómo conservar la fruta, el tecnólogo diferencia entre dos tipos:
- Climatéricas: maduran después de ser recolectadas. Ejemplos: plátano, manzana, pera, aguacate, tomate.
- No climatéricas: dejan de madurar en cuanto se recogen del árbol. Ejemplos: naranja, mandarina, cereza, frambuesa, fresa.
Este dato no solo sirve para saber cómo conservarlas, sino también para aprovechar la maduración natural. “Podemos juntar un plátano o una manzana madura con un aguacate verde para acelerar su proceso”, apunta Mario. Una técnica útil y sencilla para tener los aguacates listos justo cuando los necesitas.
Plátano y mandarina
Mezclar frutas puede acelerar su deterioro. Un error común, según Sánchez, es mezclar en el mismo frutero frutas muy maduras con otras aún verdes. “Seguro que te ha pasado eso de tener fruta que en un pestañeo se echa a perder”, dice. Esto ocurre porque las frutas climatéricas interaccionan entre sí mediante el etileno, y si no controlamos su proximidad, podemos acelerar la maduración (y el deterioro) sin darnos cuenta.
¿Fruta madura? Entonces sí, al frigorífico
Como consejo final, Mario lanza un mensaje práctico: “Si ves que se va a echar a perder, por muy climatérica que sea, mejor meterla en la nevera y consumirla pronto. Aunque pierda algo de sabor, siempre será preferible a tirarla a la basura”.
