Lucía Galán, pediatra: “Despertar a un sonámbulo no es peligroso pero al estar confundidos pueden reaccionar con miedo o desorientación”
SALUD
La experta explica que el sonambulismo puede asustar a muchas familias
Una persona sonámbula
El diagnóstico de sonambulismo en un hijo suele despertar en los padres una mezcla de miedo y desconcierto. Ver a un niño deambular mientras duerme, ajeno a su entorno y sin conciencia de sus actos, genera preocupación inmediata y la sensación de no saber cómo reaccionar. La falta de información alimenta temores: ¿es peligroso?, ¿puede lastimarse?, ¿se trata de una enfermedad grave?
La pediatra Lucía Galán, en uno de los vídeos más recientes de su canal de TikTok, ha desmontado uno de los mitos más extendidos: “Mucha gente cree que si despertamos a nuestro hijo en un episodio de sonambulismo se puede traumatizar o que incluso le puede dañar el cerebro”, empieza diciendo.
Las personas que sufren pesadillas o terrores nocturnos sufren, en ocasiones, sonambulismo
“Conocer estos factores nos ayuda a acompañar desde la calma y sin miedo”
Falso mito. La experta explica que no está aconsejado despertar a los niños sonámbulos cuando se levantan por la noche pero ni les traumatiza ni les lesiona el cerebro en caso de que accidentalmente les despertemos.
Miedo. El paciente lo vive con ansiedad o angustia porque no termina de entender dónde está, pero no tendrá ningún impacto en el desarrollo neurológico. Suele desaparecer con el paso del tiempo, cuando los niños entran en la adolescencia.
Unos buenos hábitos de sueño previenen el sonambulismo
Definición. Lucía explica que el sonambulismo es un trastorno benigno del sueño que presentan niños o adolescentes, con un sistema hereditario importante. Durante una fase del sueño, que suele ser durante el primer tercio de la noche, se levantan con los ojos abiertos y empiezan a hacer cosas por la casa.
¿Qué debemos hacer en esto casos? La experta recomienda mantener la calma, acompañarles tranquilamente hasta su habitación, les podemos dar conversación si les relaja y hacerles compañía en la cama hasta que continúen con su sueño: “Podemos tomar determinadas precauciones como cerrar bien las puertas con llave”, explica.
Factores que pueden desencadenarlo
- Falta de sueño o cansancio extremo
- Estrés o ansiedad
- Fiebre en la infancia
- Algunos medicamentos
- Dormir en un entorno nuevo o poco seguro