Un hombre es detenido por un oficial de Tráfico, quien le informa de que su licencia está vencida. “En sus manos mil papeles / burocracia elemental”, canta Juan Luis Guerra en Acompáñame, civil (1990). Con un tono satírico y una melodía pegajosa, el cantautor denuncia la corrupción y la burocracia que permea la vida cotidiana. “Acompáñame, civil / al destacamento / o resuelva desde aquí / cómpreme el silencio / y olvídese”. De forma similar, pero con una musicalidad más sombría, Ray Davies de The Kinks protesta contra la pérdida de individualidad en un mundo burocrático en 20th Century man (1971): “Nací en un Estado de bienestar / gobernado por la burocracia / controlado por funcionarios públicos / y personas vestidas de gris”.
A pesar de las distintas épocas, la misma denuncia resuena en Mr. Bureaucracy (2011) de la banda alemana Paradox, que expresa la frustración ante la ineficiencia y la naturaleza agotadora del sistema: “Me quitas el tiempo, desperdicias mi día. / Me quitas mi alma”.
