Vuelve el Barcelona Gallery Weekend (BGW), ese momento del año en el que arranca la temporada artística y las galerías se llenan de visitantes, convirtiendo la experiencia del arte en una auténtica fiesta ciudadana. Desde este jueves y hasta el domingo, la programación, en la que participan 50 artistas nacionales e internacionales, incluye exposiciones en 22 galerías de Barcelona y 2 de l’Hospitalet, en la mayoría de las cuales se han organizados un buen número de actividades, performances, charlas, rutas y visitas guiadas, muchas de ellas de la mano de sus protagonistas. Hay mucho que ver y disfrutar en esta decimoprimera edición del evento que organiza la asociación Art Barcelona. Y una novedad: algunas de estas muestras, las llamadas FLASH, permanecerán en cartel únicamente el fin de semana. A continuación, algunas propuestas en las que merece la pena detenerse.
El artista al que le persigue Picasso

Una de las piezas de Rogelio López Cuenca en Àngels Barcelona
A Rogelio López Cuenca le persigue Picasso desde que a comienzos de siglo observó estupefacto cómo la apertura del museo malagueño picassizaba la ciudad hasta extremos delirantes. La primera señal de alarma fue la sarta de disparates que publicaban historiadores hasta entonces considerados serios. Que si el toro del Gernika lo había visto de niño en una corrida en Málaga o que las lágrimas de Dora Maar en realidad eran el recuerdo de las vírgenes llorosas de la Semana Santa. Luego vino la pugna entre ciudades por ver cuál era la más picassiana, la mercantilización salvaje de su nombre hasta convertirlo en un souvenir , un producto de consumo masivo: en Málaga había un todo-a-cien que se llamaba Picassien y también un Chiringuito Picasso, además de coches, edificios, discotecas o pizzerías, donde parece ser que es el nombre más utilizado en todo el mundo. “Hoy es más estudiado en las escuelas de márketing que en las de arte”, dice López Cuenca.
Un filón inagotable a partir del cual el artista, Premio Nacional de Artes Plásticas, crea obras en las que destila su visión crítica a través de la poesía y el humor. En Àngels Barcelona presenta una selección de piezas que formaron parte del proyecto de nombre impronunciable PI©A$O™ , llevado en diferentes museos estatales con motivo del año Picasso. Desde un calzoncillo enmarcado y con cristal en cuyo centro ha dibujado el rostro de una mujer que llora al fragmento de una falsificación en la que sobresale su firma o, en el escaparate, las diferentes versiones del libro que le dedicó John Berger, Éxito y fracaso de Picasso , que se va suavizando hasta el actual Fama y soledad de Picasso . “La palabra fracaso no puede asociarse a su nombre”.
Los relatos africanos de Cristina de Middel

Una de las imágenes de Cristina de Middel que ese expone en la galería Seltz
Uno de los primeros proyectos con los que, desencantada del reporterismo, Cristina de Middel iniciaba un personalísimo camino artístico que le permitía hablar de la realidad sin recurrir al documento fue el multipremiado Los Afronautas , en el que recreó la aventura espacial de Zambia, el pequeño país africano que en 1964, tras proclamar su independencia del Reino Unido, soñó a lo grande con un programa espacial que aventajaría a rusos y americanos en su carrera por llevar un hombre a la Luna y a Marte. A este le seguirían otros proyectos con los que la artista ha tratado de rescatar el continente de la imagen estereotipada proyectando su propia mirada e imaginación. Los reúne ahora en la galería Seltz –en la que también se puede contemplar la obra del joven Iván Forcadell– y entre ellos destaca Funmilayo , que habla de la primera activista y feminista africana, madre del músico Fela Kuti, que escribió para ella Unknown Soldier después de que trataran de acallarla arrojándola por la ventana. A De Middel, que ha sido la primera española en presidir la agencia Magnum, alguien le retó: “Si él fue capaz de componer esa canción, ¿qué harías tú?”. Una maravilla entre la poesía y el humor que golpea el corazón.
La reinvención de los artistas urbanos

Aryz, junto a las 'Tres gracias', en la galería Senda
Otro de los protagonistas de este BGW es Aryz, el artista urbano que después de haber recorrido el mundo pintando muros y dejar su firma en la Basílica del Pi, se reinventa en la galería Senda como pintor al óleo que se mira en los ojos de grandes maestros a los que admira y haciendo que, de forma decidida y sin complejos, clásicos como El almuerzo sobre la hierba de Manet o Las tres gracias de Rubens den un giro inesperado. Otro grafitero, en este caso el francés Ken Sortais, ocupa el espacio de la Galería Alegría. Su método es cuanto menos peculiar: a escondidas, de noche, o disfrazado de trabajador de parques y jardines, va cubriendo de capas de látex esculturas de las fuentes hasta que la piel adquiere suficiente consistencia para arrancarla y confeccionar con ellas esculturas inflables.
Los sueños rotos de Christo y Jeanne-Claude
La pareja de artistas se hicieron mundialmente famosos por intervenciones espectaculares que les llevaron a envolver edificios y monumentos como el Reichstag de Berlín y el Pont-Neuf de París, pero por el camino dejaron muchos sueños rotos, que ahora se reúnen en la galería Prats Nogueras Blanchard. Entre ellos, Cristobal Colón. Project for Barcelon a, iniciado en 1975. Tras recibir dos negativas, el permiso fue concedido en 1984 por Pasqual Maragall, pero los artistas decidieron no seguir adelante.
De duetos y camas redondas

Imagen de la exposición colectiva en la galería Mayora l
En esta edición llaman la atención juegos de parejas como la que forman la médium Josefa Tolrà, la Pepeta de Cabrils, y Eva Fàbregas en Bombon Projects, o Mari Chordà y Bruno Munari en Chiquita Room. Pero puestos a apostar por encuentros promiscuos, ninguno como el que oficia Pedro G. Romero en la galería Mayoral. Se titula La monnaie vivante y en torno al tema del cuerpo como moneda de cambio, ha convocado a artistas tan dispares como Dalí, Basquiat, Dubuffet, Eulàlia Grau, Tàpies, Barquero, Marria Pratts, Niki de Saint Phalle, Rachel Valdés, Ocaña o Antonio Saura y que, por supuesto no se ha querido perder Picasso.