El canadiense Abel Tesfaye, más conocido como The Weeknd, no se ha olvidado de Barcelona en la reválida del After hours til dawn tour, la gira que ya le trajo al Estadi Olímpic en el 2023, y con la que volverá a pasar por el mismo espacio el próximo 1 de septiembre del 2026. El autor de Blinding lights, tema que recientemente superó las 5.000 millones de escuchas en Spotify, ya había anunciado tres fechas en el estadio Metropolitano de Madrid dentro de la gira europea de 30 conciertos que le llevará por París, Londres, Dublín, Milán o Amsterdam.
La alta demanda de entradas suscitada por esta nueva oleada de conciertos se explica en parte por las amenazas veladas de Tesfaye, que ha deslizado en más de una ocasión la voluntad de matar al personaje de The Weeknd. Así lo anunció al presentar en enero el álbum Hurry up tomorrow, culminación de la trilogía completada por After hours (2020) y Dawn FM (2022), y que según anunció será el último disco publicado con el nombre artístico que le ha hecho famoso.
En el que podría ser su último trabajo, Tesfaye reincide en la mezcla de r&b y sintetizadores para adentrarse en las oscuridades sociales y emocionales de sus dos anteriores trabajos, protagonistas también del aparato escénico en los conciertos, pura imaginería neogótica con grandes robots metalizados, columnas de luz y ciudades en llamas. En esta ocasión el canadiense ofrece 22 nuevos temas que es de esperar que suenen en parte en los conciertos, y en los que han colaborado voces de la talla de Lana del Rey, Travis Scott o Florence & The machine, además de contar en la producción con Pharrell Williams o Justice.
De ser cierto el adiós, otorgaría un final a la altura del artista que comenzó sus andanzas musicales en el 2010 cuando publicó sus tres primeros temas en Youtube, r&B oscuro bajo el título de What you need, Loft music y The morning, firmadas ya por The Weeknd. Fue el punto de inflexión de un artista que, si es cierto el relato, malvivía en un apartamento compartido de Toronto mediante robos en supermercados y trapicheo de drogas que también consumía. Todo lo opuesto del artista que ha publicado seis discos y que, comparado en ocasiones con Michael Jackson, cuenta con 117 millones de seguidores en la principal plataforma musical.

