En ocasiones, la carrera de un deportista está marcada por situaciones imprevisibles que pueden truncar un sueño o, como en este caso, hacerlo posible. Una lesión muscular en el mes de enero cambió la hoja de ruta de Ander Garaiar para el campeonato de Europa. Dejó a un lado los 200 metros, su prueba estrella, y se centró en el 100. Competir en esa distancia le permitió redescubrirse como atleta y conseguir la primera medalla de oro continental para un atleta español en cualquier categoría de los 100 metros. El joven velocista vasco, de 18 años, se impuso el pasado viernes en la final disputada en la ciudad finlandesa de Tampere con un tiempo de 10s40.
“Hicimos un entrenamiento muy conservador desde junio, porque se resintió de una rotura de fibras que sufrió en enero. Teníamos el miedo de que la lesión en el isquiotibial y unas molestias en el pie le impidieran competir. Esas circunstancias también son las que nos han obligado a decantarnos por el 100, que en principio parecía el camino más difícil para hacer un buen puesto en el Europeo, porque su primer récord de España fue en los 200”, relata Valentín Rocandio, entrenador de Garaiar.
El velocista, atleta júnior de primer año, empezó desarrollando su pasión por el atletismo en Oiartzun, población donde nació y que se encuentra a unos 15 kilómetros de San Sebastián. En una primera etapa se ejercitaba en el club de su colegio (Haurtzaro) tres días a la semana, y también aprovechaba un carril bici muy largo de la localidad guipuzcoana para hacer series. El mayor de los Garaiar, Beñat, se centró en el ciclismo de ruta y de pista, deportes muy practicados en Oiartzun.
Garaiar, de 18 años, se resintió en junio de una lesión en el isquiotibial que le hizo cambiar los 200 metros por el 100
Fue en septiembre del 2024 cuando los caminos del atleta y Valentín Rocandio se juntaron. El joven corredor se marchó a San Sebastián para estudiar un módulo de informática y el monitor que tenía por aquel entonces, exalumno de Rocandio, le pidió a este que entrenase a Garaiar. “Algún atleta de los que entrenaba me dijo: ‘Oye, que este chaval es muy bueno’”, rememora el técnico en una conversación con La Vanguardia . Los pronósticos se cumplieron rápidamente. En el 2025 consiguió el récord de España en los 200 metros con 20s74 en la categoría sub-20, y en el Campeonato de Gipuzkoa paró el cronómetro en 10s29 en la prueba de los 100 metros.
Aunque el joven atleta no haya gozado de la mejor preparación para afrontar el Europeo, fue capaz de hacer gala de su gran talento. “Su forma de correr es muy buena. Tiene un ciclo de carrera muy bueno y eso ya lo traía de casa. Tiene una técnica que, en parte, es innata”, dice Rocandio. El exatleta recuerda además que al principio a su pupilo “le costaba aguantar los entrenamientos, sobre todo los de rodaje, porque no estaba acostumbrado”.
Si entrena en condiciones podrá llegar a bajar de los 10s10 en un año o dos”
En cuanto al magnífico papel que realizó Garaiar en la final que ganó, Rocandio afirma que “lo habitual en una carrera de 100 metros es que el ganador saque una centésima o dos, tres como mucho. Ander sacó siete a los que quedaron segundos”.
Por ahora, Rocandio no visualiza el techo de Garaiar, del que dice que, “si no hay problemas de lesiones y entrena en condiciones”, podrá llegar “a bajar de los 10s10 en un año o dos”. La cifra no es baladí, ya que Bruno Hortelano, que ostenta la mejor marca de un español en el hectómetro, registró 10s06 en el 2016 en Madrid con 25 años.
Con su histórico oro, el joven de Oiartzun personaliza el éxito que ha cosechado la delegación española durante la disputa del Europeo sub-20 en Finlandia que finalizó ayer.
La selección española regresa a casa después de quedar tercera en el medallero (superada por Gran Bretaña e Italia) y haber conseguido un total de 14 metales (cinco oros, tres platas y seis bronces). La alegría pudo ser aún mayor si se hubiese confirmado el oro en el 4x100, donde competía Garaiar junto a Ignacio Hernández, Oriol Sánchez y Jorge Hernández. El cuarteto español fue descalificado por un cambio fuera de zona tras quedar primero.
Lo que ya nadie podrá quitar a esta nueva hornada de precoces atletas, excepto futuras generaciones, es el honor de ser la más laureada de España en un Europeo sub-20.