Es una patata caliente de importantes dimensiones. Una cuestión que puede sentar un precedente. Una novedad sobre la que no está claro el marco reglamentario y la UEFA duda sobre su posición al respecto y, sobre todo, sobre qué potestad tiene si decide colocarse en contra. Se trata de la disputa de encuentros de ligas naciones en territorios extranjeros, en especial en otros continentes fuera de las fronteras de los países pertenecientes a la UEFA. El Comité Ejecutivo del organismo rector del fútbol europeo se reunió ayer en Tirana y no se atrevió a determinar aún si aprueba la celebración del Villarreal-Barcelona en Miami (Estados Unidos) en diciembre y del Milan-Como del mes de febrero en Perth (Australia).
El presidente del la UEFA, Aleksander Ceferin, no ve con buenos ojos la exportación de estos encuentros pero no sabe si con el reglamento de la FIFA en la mano (el organismo superior) se puede plantear prohibir la celebración de estos partidos en Miami y Australia. Es por eso que ha determinado bosquejar con qué fuerza cuenta en el panorama continental. A tal efecto anunció que abrirá “una ronda de consultas con todas las partes interesadas del fútbol europeo, incluidos los aficionados”.
La UEFA estudió la documentación entregada tanto por la Federación Española como por la Italiana, favorables a Miami y Perth y prefirió darse más tiempo. “Se trata de una cuestión importante y cada vez más relevante. Hay que garantizar que se tengan en cuenta las opiniones de todas las partes interesadas antes de tomar una decisión definitiva. Hay muchos asuntos que resolver y, como organismo rector europeo, la UEFA tiene la responsabilidad de tener en cuenta todos estos factores”, explicó el organismo, que se volverá a reunir el 3 de diciembre.
También se da la circunstancia que la empresa Relevent, que es la que está asociada con LaLiga para su expansión internacional en Estados Unidos, tiene ligazones con la UEFA y esta última es consciente de que después la FIFA puede aprobar la celebración de los partidos en el extranjero.
“Hay que garantizar que se tengan en cuenta las opiniones de todas las partes interesadas”, dice la UEFA
El organismo mundial decidió hace un año introducir diversos cambios en el Reglamento de Partidos Internacionales en lo relativo a la autorización de partidos fuera del territorio de la federación correspondiente.
Los casos de la liga española e italiana se diferencian en un punto que puede tener su importancia. En Italia hay consenso entre todas las partes. El 6 de febrero el estadio milanés de San Siro está ocupado por la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de invierno y nadie, ni jugadores, ni gobierno ni clubs han puesto el grito en el cielo ante la opción australiana.
En cambio, en España hay greña. LaLiga, la Federación, el Villarreal y el Barcelona son partidarios de jugar el encuentro en Miami. Pero el Real Madrid, que emitió un comunicado, la Asociación de Futbolistas y el Gobierno están en contra. En este sentido, Pilar Alegría, ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, aseguró en declaraciones a la cadena SER que su posición es contraria. “Me gusta que las competiciones nacionales se jueguen en mi país. Soy partidaria de que se jueguen en España”, afirmó. “Como Gobierno, estoy atrayendo competiciones internacionales a mi país. Imagínese dónde quiero que se disputen las nacionales. En mi país, donde hay grandes ciudades”, agregó.
El Gobierno cree que llegado el caso de que la UEFA y la FIFA aprueben la vía Miami puede terminar prohibiendo la exportación del encuentro a través del Consejo Superior de Deportes (CSD). En cambio LaLiga disiente de esta posibilidad y piensa que con la nueva Ley del Deporte en la mano el CSD no podría oponerse.
La final masculina de la Champions del 2027 será en el Metropolitano y la femenina, en Varsovia
En lo que sí resolvió la UEFA fue en el asunto de las sedes masculina y femenina de las finales de la Champions del 2027. En cuanto a la masculina el estadio elegido fue el Metropolitano de Madrid. Se impuso a la opción de Bakú. Desde hace tiempo el campo del Atlético era el favorito y se confirmó. En el aire una cierta compensación por el penalti birlado a Julián Álvarez ante el Madrid en la última Champions. En cuanto a la sede femenina la UEFA se decantó por Varsovia. El Camp Nou también optaba a esta última pero su candidatura había ido perdiendo peso, tanto por el favoritismo del Metropolitano para los hombres como por los retrasos en las obras del recinto.