La Copa del Rey llega en un mal momento para el Girona, pero a su vez puede servir para pasar página de los finales amargos en los dos últimos partidos, con goles en contra en el añadido que costaron puntos, y para olvidar la condición de colista en la Liga. “Es muy importante pasar. La Copa no molesta. Es un buen momento para afrontarla”, dijo Míchel en la previa del partido de primera ronda de hoy ante el Constància mallorquín, de la Tercera Federación.
El técnico, siempre positivo, está “más seguro de salir” de esta mala dinámica de resultados tras ver una “mejora en los últimos cinco partidos”. “En la Liga estamos en una mala posición, pero la mejor forma de crecer es jugando. Tenemos que mirar hacia delante”, añadió el madrileño antes de una eliminatoria a partido único en territorio balear que prevé “igualada” por la “motivación especial” del modesto rival de Inca.
En la Liga estamos en una mala posición, pero la mejor forma de crecer es jugando”
Como es habitual en estos casos, debido a la diferencia de nivel, el Girona presentará un once con muchas rotaciones, pero entre los elegidos no estará por un problema en la espalda el portero Livakovic, fichado el pasado verano y aún sin minutos. El también arquero suplente Juan Carlos también es baja, igual que David López, Van de Beek, Francés, Blind y Lass.
En cambio, sí podría tener su oportunidad Pol Arnau, que curiosamente la temporada pasada fue el verdugo de los gironins en la segunda ronda cuando militaba en el UD Logroñés. El catalán, cuya posición habitual es lateral, se puso bajo palos en la prórroga tras lesionarse el portero, cuando ya se habían agotado los cambios, y en los penaltis se erigió en el héroe de los riojanos al detener el lanzamiento de Abel Ruiz. Un homenaje a su padre fallecido, el exportero Francesc Arnau. “No se pondrá de portero”, bromeó Míchel.
Los jugadores del Espanyol celebran el gol de Carlos Romero al Elche.
El Girona será el primero de los diez clubs catalanes que jugarán este año la Copa. Mañana, el Sabadell visitará al Poblense mallorquín, de Segunda Federación, mientras que el Sant Andreu jugará en casa ante un rival de categoría superior como el Teruel, de Primera Federación. El Atlètic Sant Just disputará el duelo más importante en sus 15 años de historia contra el Mallorca, su primer rival de Primera. El Reus y el Europa cerrarán la jornada de mañana en tierras tarraconenses con el primer duelo entre catalanes. El segundo será entre el Espanyol y el Atlètic Lleida, de Segunda Federación, el jueves en el Camp d’Esports. Por su parte, el Nàstic jugará a domicilio ante el Atlético Baleares, también de Primera Federación, en el cuarto partido entre catalanes y mallorquines de la primera ronda.
