El Girona concluye un año para el olvido con un decepcionante final frente al Atlético.

Girona, 0 - Atlético, 3

Los pupilos de Míchel terminan el año 2025 en puestos de descenso después de caer frente a los dirigidos por Simeone en un encuentro en el que apenas generaron oportunidades de anotar.

GIRONA, 21/12/2025.- El jugador del Atlético Giuliano Simeone (20, de espaldas) reacciona durante partido de Liga que disputan Girona y Atlético de Madrid en el estadio de Montilivi. EFE/David Borrat

Vitor Reis, Francés y Tsygankov expresan su pesar mientras Giuliano festeja el tanto de Gallagher en Montilivi.

David Borrat / EFE

Pochissimi club, se non nessuno, hanno sperimentato un anno di così tanto contrasto come il Girona. La squadra ha iniziato il 2025 ascoltando le ultime note della Champions, una melodia quasi divina per l'entità, e sta finendo dicembre, al suono di amari canti natalizi, immersa in una dura realtà da cui non riesce a sfuggire. L'incanto europeo ha lasciato il posto a una serie di scarsi risultati nella seconda parte della scorsa stagione, flirtando fino alla penultima giornata con la retrocessione, che stanno continuando in questo corso.

Los de Míchel concluyeron en Montilivi un período de doce meses que resultó en apenas 8 triunfos de 41 encuentros, sumando 23 reveses, el más reciente hoy frente a un Atlético de Madrid que demostró su experiencia, aplicando sus fundamentos en ambas zonas del campo, para someter a un rival que no pudo causarle peligro. A pesar de ser un equipo formidable, la Liga, y aspirantes al campeonato, los colchoneros arribaron al partido con solo dos victorias fuera de casa, motivo por el cual el Girona albergó esperanzas de obtener un obsequio navideño sorprendente, tal como ocurrió contra el Real Madrid. No obstante, la falta de efectividad en ataque, con Vanat nuevamente desconectado, y la fragilidad defensiva, con Arnau y Vitor Reis expuestos en esta ocasión, reiteraron las razones por las que los gironins han permanecido 16 jornadas en puestos de descenso.

Arnau's feeble clearance was intercepted by Vitor Reis, and Koke ultimately scored after Gallagher's follow-up attempt.

La principal preocupación del Girona giraba en torno a cómo compensar la falta de Ounahi, ya participando en la Copa África. Entraron en la alineación Francés, lo que llevó a Arnau al mediocampo, y también Joel Roca, si bien las tareas del marroquí, de vital importancia, fueron asumidas por Iván Martín, quien avanzó su posición en la línea de volantes. La ausencia del jugador de Casablanca se percibió desde el principio, con un Girona poco inspirado en las zonas finales, incapaz de superar a un oponente robusto y bien posicionado defensivamente.

Los de la capital necesitaban una mejor elaboración de la jugada, con pases que al final no resultaban fructíferos, mientras que los visitantes, con un enfoque más directo, tenían una estrategia definida: rapidez en la transición, con Giuliano, Julián Álvarez y Sørloth como puntas de lanza, y en las ofensivas organizadas, presionar con continuos balones aéreos a la defensa con peores estadísticas de la Liga. Finalmente, la retaguardia cedió ante otro grave fallo, el enésimo del ejercicio. Arnau no logró despejar un esférico que caía del cielo y Koke capitalizó el balón dócil en la frontal para conectar un magnífico disparo a la escuadra. Un golazo inalcanzable para Gazzaniga.

Con la ventaja en el marcador, el equipo de Simeone retrocedió, como suele ocurrir, permitiendo al Girona ganar terreno, un equipo que pensó dominar el encuentro al superar con cierta facilidad la presión alta y circular el balón. Sin embargo, la posesión, completamente inofensiva, no alteró en absoluto la densa defensa del Atlético. Sin ideas claras, el conjunto de Míchel solo amenazó la portería a balón parado. Después de dos intentos de remate, Witsel aprovechó un tiro directo que se estrelló contra la gran parada de su antiguo colega Oblak. La única nota negativa para el Atlético fue la lesión de Nico González. Aunque algunos en el bando visitante podrían haber pensado que no hay mal que por bien no venga. Entró Gallagher para reemplazar al argentino y a los diez minutos anotó gracias a la ayuda de Vitor Reis, quien desvió la trayectoria del tiro al intentar interceptar el lanzamiento.

Con una desventaja de dos tantos y frente a un rival muy sólido, la tarea se volvió prácticamente inalcanzable para un Girona que no logró asimilar la situación en la segunda mitad. Ni Tsygankov, quien careció de la chispa mostrada en Anoeta, ni las incorporaciones de Bryan Gil, Asprilla y Lemar, cedido por el Atlético, lograron desestabilizar la firmeza del Atlético, que solo permitió una incursión de Álex Moreno que Oblak volvió a detener. Los blanc-i-vermells continuaron sus intentos con disparos inofensivos mientras Sørloth buscaba marcar y Koke, tras otro remate a primer toque, rozaba su segundo gol. En la banda, Simeone y Míchel parecían competir en vehemencia, hasta que el técnico de Vallecas, en su partido número 200 con el club, aceptó la derrota con los brazos cruzados al presenciar el gol de Griezmann en el tiempo añadido. La aspiración del Girona para el 2026 es definida: eludir el descenso, lo cual exige una notable mejora tanto en su capacidad ofensiva como defensiva.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...