Hablar de Sergio Busquets (37 años) es hablar de fútbol. Referirse a él es referirse a un futbolista. Nada más y nada menos. Si abalorios. Sin adornos. Sin veleidades. Tan sencillo y tan complejo como levantar la mirada y poner el balón exactamente donde se quería. Tan fácil y tan difícil como intuir hacia donde va ir una pelota para alargar una pierna infinita y rebañarla. El último del legendario centro del campo del mejor Barça de la historia que queda en activo anunció este viernes que colgará las botas cuando el Inter Miami ponga fin a su temporada. Eso será como máximo con el final de la liga de la MLS el 6 de diciembre. Nunca fue el pivote de Badia un amante de las redes sociales y tardó mucho en apuntarse a este carro cuando gran parte de sus compañeros ya las usaban como moneda común pero colgó un video para revelar que van a ser sus últimos meses como futbolista. Tras Xavi e Iniesta, que ya dijeron adiós, ahora le llega el turno a Busquets.
Busquets celebra un gol azulgrana en el Santiago Bernabéu.
Tan discreto como imprescindible, tan poco amigo de los focos como focalizado, tan valorado por compañeros, rivales y entrenadores como subestimado a veces por la crítica y por los premios individuales. Porque Busquets nunca buscó el lucimiento personal en su juego, sino ser el eje de un engranaje colectivo. Una pieza vital para que toda la maquinaria funcionara a su alrededor. El jugador que hacía fluir el fútbol con una limpia salida de balón y un mago a la hora de presionar al estar la mayor parte del tiempo en el sitio correcto.
Busquets se retira como campeón del mundo, de Europa, de Champions, con nueve Ligas y siete Copas del Rey
Se retira uno de los futbolistas más laureados de la historia del Barça, con 32 títulos, entre ellos 9 Ligas y 3 Champions. Y también se va uno de los jugadores que más veces defendió la camiseta blaugrana, ya que disputó con el club 722 partidos, solo superado por Messi (778) y Xavi (767). “Siento que ha llegado el momento de decir adiós a mi carrera como futbolista profesional. Han sido casi 20 años disfrutando de esta historia increíble que siempre soñé”, afirma Busquets, que se acordó del equipo barcelonista. “Gracias al Futbol Club Barcelona, el club de mi vida, ahí cumplí los sueños que tenía de niño, vestí la camiseta que amaba en cientos de partidos, celebré muchos títulos y viví momentos únicos en el Camp Nou que jamás olvidaré”.
Nadie podía imaginarse cuán extensa y prolija sería su trayectoria cuando Josep Guardiola le dio la alternativa en la temporada 2008-2009, en una campaña en la que también se consolidó otro canterano humilde y trabajador como Pedro Rodríguez. Pero desde que se estrenó ante el Racing de Santander el 13 de septiembre del 2008 el técnico de Santpedor no dejó de tenerlo en sus planes. Primero en plena competencia con Touré Yayá y después ya como jefe absoluto del pivote. Touré tenía más registros y más gol (lo de ver portería nunca ha sido el fuerte del catalán) pero como especialista en el mediocentro ninguno como el de Badia.
No tardó en llegarle la oportunidad de convertirse en internacional, de la mano de Vicente del Bosque. Con ‘la roja’ levantó el Mundial de Sudáfrica en 2010 y la Eurocopa del 2012. El seleccionador llegó a decir que hubiera querido ser en su etapa de futbolista como Busquets, que formó un doble pivote de quilates en la selección con Xabi Alonso. “Fue un honor representar a la selección tantas veces”, dice el centrocampista.
“Han sido casi 20 años disfrutando de esta historia que siempre soñé”
Después de Guardiola, los siguientes entrenadores solo hicieron que seguir manteniéndolo en el once de forma casi inamovible. Tito Vilanova, Martino, Luis Enrique, Valverde, Setién, Koeman, Xavi…Así hasta llegar al 2023, quince años después de su estreno barcelonista, cuando decidió hacer las Américas e irse al Inter Miami, donde comparte su última etapa con amigos como Messi y Jordi Alba. Se marchó del Barça consiguiendo la llamada Liga del 1-0 y participando en 30 partidos del campeonato. Puede decir bien alto que jamás fue un suplente del Barcelona. Antes de ocupar con frecuencia el banquillo se marchó.
Es el tercer futbolista con más partidos de la historia del Barça
Su anuncio provocó reacciones de cariño. Como la de Iniesta. “Qué privilegio compartir contigo todos estos años, hermano. ¡Cómo he disfrutado a tu lado! ¡Qué bien lo pasamos! Eres uno de lo más grandes de la historia del fútbol, sin duda alguna. Has tenido una manera de jugar única, que quedará para siempre en nuestra memoria”, le regaló el manchego. Igual de cálido se mostró Sergio Ramos. “Busi, eres la definición de cómo ser excepcional sin dejar de ser un tío normal. Rival la mayoría de veces, compañero otras muchas, siempre has sobresalido por tu fútbol de clase, visión y calidad, y por tu forma de ser humilde y auténtica”. Nunca necesitó otros elogios que los que le venían de sus compañeros de profesión. Fútbol. Sólo fútbol.