La temporada pasada el Barça de Flick fue un vendaval ofensivo. Su delantera titular, formada por Lamine Yamal por la derecha, Raphinha por la izquierda y Lewandowski por el centro firmó números individuales y colectivos extraordinarios. El polaco marcó 42 goles entre todas las competiciones, el brasileño 34 con 23 asistencias y el canterano, 18 tantos y 21 pases de gol. Entre los tres, lograron 94 tantos y la participación directa o indirecta en 141, ya que hay que añadir las tres asistencias que sumó Lewandowski. Una de las explicaciones del porqué el Barça actual no carbura como el de la temporada pasada es de cajón: estos tres futbolistas no coinciden en la misma alineación titular por distintas circunstancias (lesiones, básicamente) desde hace seis meses. Fue en San Mamés. Vencieron los blaugrana (0-3) con dos goles de Lewandowski.
Esta tarde ante el Alavés (16.15h) está en manos de Flick reunirlos de nuevo como titulares. Solo pueden evitarlo Ferran Torres, quien por cierto el curso pasado aportó la nada desdeñable cifra de 19 goles, así como Marcus Rashford, que fue suplente en Londres ante el Chelsea. Sea como fuere, Flick suspira ante la sola posibilidad de poder hacerlo por primera vez esta temporada. Quizá por eso en la rueda de prensa de ayer se mostró optimista pese a venir de sufrir una de las derrotas más duras desde que entrena al Barça, 3-0 ante el Chelsea en Stamford Bridge.
He añorado a Raphinha. Es uno de nuestros jugadores más importantes”
El alemán alabó a Raphinha, el último de los tres delanteros en incorporarse al grupo tras dos meses de lesión. Disputó de hecho unos minutos en Londres esperanzadores: “Le he añorado. Es uno de los jugadores más importantes de nuestro equipo. Es esencial cuando iniciamos la presión y en las transiciones. Tiene hambre y ganas de demostrar lo bueno que es. Quiere volver a ser el que es”.
Flick sustenta su tono esperanzador en el retorno del brasileño, en el de Pedri (“no será titular pero jugará minutos”, avanzó) y en lo que está viendo de sus jugadores estos días: “Me está gustando lo que me transmiten en los entrenamientos, hay más intensidad. Soy positivo y optimista porque podemos hacerlo mejor y lo haremos. Creo que estamos en el buen camino para conseguirlo”.
Lamine está bien de ánimo. Es normal no estar contento cuando te sustituyen”
Flick remarcó que la recuperación inmediata tras la derrota de Londres pasa por volver a funcionar como un colectivo. Considera incorrecto culpar solo a la defensa de los goles encajados o del desbarajuste táctico: “Cuando perdemos y encajamos tres goles es fácil decir que no hicimos un buen partido y que no dimos la imagen habitual del Barça. Las críticas de los especialistas fueron muy duras para nuestros cuatro defensas en línea pero para mí defender no es solo responsabilidad de ellos. Si no presionamos muy bien todos, incluidos los de delante, tendremos problemas”.
Respecto a otros nombres propios, Flick no quiso polemizar con la desaparición de Marc Casadó de las alineaciones (“tendrá oportunidades, cuenta con nuestra confianza”, dijo), desveló que Araújo, anímicamente tocado por su expulsión, lleva un par de días sin entrenar por problemas estomacales y será baja y dedicó unas palabras a Lamine Yamal: “Está bien de ánimo. Muchos jugadores no están contentos cuando los cambias, yo he sido jugador, pero se trata simplemente de expresar una emoción. Además, Cucurella es uno de los mejores laterales izquierdos del mundo. Bueno e intenso. Debe olvidarse de ese partido y pensar en el Alavés”.
