Los Aston Martin de Stroll y Vettel, los únicos valientes junto a Zhou en montar gomas blandas, pagaron su osadía y no pasaron el corte en una Q2 dominada ya por Leclerc. Alonso estuvo al borde de la quema, pero finalmente pasó a la batalla final con el quinto mejor crono gracias a una gran vuelta en la última oportunidad. En cambio, contra pronóstico, George Russell se quedó fuera de una lucha por la pole a la que Hamilton pasó con el segundo mejor tiempo. Mucha diferencia entre los dos Mercedes.
Los márgenes entre los favoritos fueron muy estrechos, de menos de dos décimas entre Leclerc, Hamilton, Sergio Pérez y Sainz, pero finalmente se llevó el gato al agua el monegasco, más habilidoso sobre el bacheado circuito de Marina Bay, donde Verstappen abortó su último intento tras un error en el sector final y, sobre todo, porque no tenía combustible suficiente para volver a boxes, lo que le hubiera supuesto una sanción de la FIA. Todo apunta que el neerlandés no podrá sellar su segundo título en la ratonera singapurense. Se lo puede permitir, su reinado no corre peligro.
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