El día ha llegado. Este miércoles se oficializará un cambio de era anunciado hace meses, pero cuya envergadura lo ha dilatado en el tiempo. El Espanyol cambia de manos. Llega el norteamericano Alan Pace, que se hará con el paquete mayoritario de acciones a través de su empresa Velocity Sports Limited, y se convertirá oficialmente en el nuevo dueño del club.
La formalización tuvo lugar en la sede del despacho de abogados Rousaud-Costas-Durán, que representan al club, en la mañana de ayer. Hasta allí acudieron el propio Alan Pace, Brad Spiby, su mano derecha, y Mao Ye (CEO del club), con poderes otorgados desde Shantou por parte de Rastar. Una vez firmada la documentación se tendrá que esperar unas horas para la confirmación oficial, hasta que desde China se ratifique la recepción de los 65 millones de euros que VLS ha puesto sobre la mesa inicialmente para comprar el Espanyol.
La compraventa fue anunciada el pasado 14 de julio y avalada hace unas semanas por el Consejo Superior de Deportes. El siguiente paso era la formalización documental, y el parón liguero por la convocatoria de selecciones ha sido el momento ideal para llevarlo a cabo.
Rastar y Chen dicen adiós diez años después de su llegada al club
Después de diez años al frente de la entidad, Chen Yansheng y Rastar Group dejan la propiedad, aunque no desaparecen del todo todavía pues contarán con una participación del 16,45% de la empresa matriz que Chen puede vender a lo largo de los próximos años. Ha sido la del dirigente chino una etapa de ilusión en el inicio y de decepciones al final, que ha permitido, eso sí, el saneamiento de las arcas del club con la venta final. Una clasificación europea y dos descensos son su legado, junto a una sensación de abandono para buena parte de la afición por ser gobernado el club a kilómetros de distancia.
Alan Pace llega para, entre otras cosas, cambiar estas sensaciones y dar un impulso global al club, acercarlo a sus aficionados y proyectarlo deportiva y socialmente. El empresario norteamericano ya sabe lo que es dirigir un club histórico en Europa, es dueño del Burnley inglés, con lo que con esta operación avanza en la construcción de su sistema multiclub.
Antonio Dávila y Brad Spiby serán los nuevos jefes del club
Junto a Pace desembarcan hombres de su confianza que serán clave en esta nueva etapa en el Espanyol. Antonio Dávila y Brad Spiby, que apunta a ser el nuevo CEO del club en lugar de Mao Ye, se han dejado ver a lo largo de este proceso junto a Pace y JJ Wats, uno de los accionistas de la compañía. Visitaron a los capitanes en Navata y compartieron decisiones de mercado con Fran Garagarza, quien les hizo de cicerone para conocer a fondo la entidad. Además han estado en el palco en diversas ocasiones y compartiendo muchos momentos con la afición, algo que se ha echado en falta por parte de los dirigentes chinos.
La llegada de Velocity se produce en un momento de enorme simbolismo para el club, con la celebración del 125 aniversario el próximo 28 de octubre. En el acto central estarán ya los nuevos propietarios al frente.
Los nuevos dueños llevan ya unos meses preparando una hoja de ruta que en los próximos días debe ser explicada. Una presentación esperada por una afición que demandaba desde hace meses un cambio para volver a ilusionarse con su club.
