Algún jugón de las redes, hace cuatro años, le abrió a Jaume Munar una cuenta en X.
Munar ‘el mágico’, la bautizó.
La cuenta va haciendo. Ronda los 5.000 seguidores.
Esa historia entretiene a su protagonista, Munar (28), aunque nuestro hombre tampoco le presta demasiada atención porque está para otras cosas. Está, por ejemplo, para asomarse al Top 50.
–En el móvil, me he marcado un tiempo máximo por día. Si lo supero, se me bloquea –le contaba Munar a Nacho Albarrán (As) en estos días–. Yo utilizo muy poco las redes sociales. Pero mientras nos lo pasemos bien con ellas, adelante. Lo único que me interesa es alcanzar el Top 50.
Ahora mismo, Munar es el 55.º del mundo, así que el hito le espera ahí, a la vuelta de la esquina: está a un partido de lograrlo, como quien dice, y eso es poco o mucho. Depende de su choque de segunda ronda ante Fabian Marozsan, este jueves.
Si lo gana, misión cumplida.
En progresión
Tras apretar a Alcaraz en Queen’s y superar a Bublik, el manacorí acaricia su sueño: entrar en el Top 50
–Poco a poco, voy desarrollando mis armas. Ya lo hacía en los entrenamientos, pero necesitaba mostrarme más agresivo al competir –cuenta Munar ahora que se ha crecido: hace unos días le apretaba las tuercas a Carlos Alcaraz en Queen’s (llegó a forzarle el tercer set al murciano) y este martes se deshacía de Alexander Bublik (28.º favorito) en cinco sets (6-4, 3-6, 4-6, 7-6 (5) y 6-2).
Abanico de sorpresas
Ya han caído Zverev (3), Musetti (7), Rune (8), Medvedev (9), Cerúndolo (16) y Tsitsipás (24)
(El mismo Bublik que se lo pasa bien en la pista, tipo saleroso que vive el tenis como un disfrutón y tanto pierde estrepitosamente ante Sinner en Roland Garros como le devuelve el golpe al italiano pocos días más tarde, en Halle).
Para asomarse a este hito, Jaume Munar ha necesitado diez años: los mayores del lugar le recordamos en las pistas de medio mundo, actuando como sparring de Rafael Nadal en los primeros arreones del manacorí. Entonces, los expertos le vislumbraban a Munar un futuro espléndido. Ese futuro que hoy es presente va llegando, avanza a paso lento, pero en estos días lo hace con buena letra.
(La escabechina de cabezas de serie es extraordinaria: ya han caído Zverev (3), Musetti (7), Rune (8), Medvedev (9), Cerúndolo (16) y Tsitsipás (24)).