Pascual se refuerza con el café con leche
Empresas | Alimentación
La alimentaria plantea reposicionar sus lácteos y crecer en hostelería
La empresa quiere liderar el negocio del café en España creciendo con compras
Aunque el panorama lácteo en los supermercados españoles se ha desdibujado mucho con la entrada de la marca blanca, si a una persona criada en España le pides que diga tres marcas de leche, una, con altísima probabilidad, será Pascual. Pero la alimentaria, con más de 50 años de historia, es más que leche. Su portfolio gira en torno a los productos lácteos, pero también del agua, el café o las bebidas vegetales con un total de hasta 11 marcas, como Bezoya, Mocay o Bifrutas.
Esta diversificación les ha protegido de la altísima competencia de la marca blanca, pero también les ha desdibujado, como asume el director general de negocio, César Vargas. “Somos una empresa multicategoría y multicanal. La competencia con la marca blanca nos ha afectado, como a todos los fabricantes, pero mucho menos que a otros por esta diversificación. Pero nos faltaba foco y priorización”, detalla el directivo, además de hacer un ejercicio “muy potente de escuchar al consumidor”.
A sus 50 años, cuenta con 6 fábricas, exporta a 52 países gracias a sus 11 marcas
Priorizar implica elegir tus batallas y de ahí, los responsables del grupo alimentario seleccionaron sus puntos fuertes: buscarían crecimientos fuertes en las divisiones de agua, café y bebidas vegetales, empujarían el negocio logístico con Qalianza, su empresa distribuidora, mientras que para el segmento de la leche, tomaron otra opción: reinventarlo. Con estos pilares, el objetivo es alcanzar para el 2027 los 1.000 millones de euros en facturación, con un resultado antes de impuestos (ebitda) de 80 millones. Para este año, prevén cerrar en el entorno de los 920 millones, “muy parecido al año pasado”, pero con un incremento del ebitda de alrededor de un 15%. Para el 2025, aspiran a un crecimiento de la facturación del 3% y una subida de doble dígito del ebitda, por debajo de los 70 millones. “Estamos muy confiados con alcanzar nuestro objetivo de ingresos e incluso adelantarlo”, asegura el director de negocio.
En esta reinvención del lácteo, en busca de un posicionamiento de valor añadido, Pascual lanzó hace unas semanas Movit, un producto que sustituirá a su actual leche Pascual Calcio para ese segmento de leche enriquecida y en la que la compañía ha invertido cuatro millones de euros. Espera duplicar su actual cuota de mercado del 6% en este segmento.
“Pascual siempre ha innovado en el mundo del lácteo. Trajo la primera leche en brik, la desnatada, la rica en calcio... Pero hace años que no hay grandes innovaciones y no solo por las dificultades para entrar en las cadenas de distribución. También porque todos nos hemos dejado arrastrar por la batalla del precio”, asume Vargas. El director general de negocio de Pascual estima que lanzarán tres nuevas innovaciones el año que viene: un nuevo producto en febrero, que “supondrá un bombazo dentro de la gama de productos lácteos de Pascual”, y que no quiere desvelar, y dos más, que llevarán a evolucionar Movit y Dinamic, su bebida rica en
proteínas.
Vargas apunta que, cuando hablan de leche, se tiende a pensar en el consumo en el hogar cuando la compañía es líder en leche para hostelería, un mercado con unas tasas de rentabilidad más altas que la distribución. Y para crecer en este consumo fuera del hogar, Pascual está apostando por un producto de lo más complementario, el café. “El negocio del café está tan atomizado en España como la propia hostelería. Hay más de 400 tostadores en este país y no hay ningún líder claro”, explica Vargas.
La empresa quiere liderar el negocio del café en España creciendo con compras
La compañía compró en noviembre la histórica marca de cafés catalana Saula, que se une a las adquisiciones de Mocay, en el 2010 y de Jurado, en el 2022. “Con la compra de Saula somos el tercer operador de café, pero a medio plazo queremos ser líderes”, explica. La estrategia es ganar peso de manera orgánica, llegando a más establecimientos hosteleros y, a la vez, creciendo con compras en el mercado español. “Saula es una marca con un prestigio extraordinario en Catalunya. Han construido una marca prémium que tiene unas posibilidades enormes de expandirse en otras áreas de la península”, dice
Vargas.
Y a partir de aquí, Pascual quiere desarrollar un portafolio de productos específicamente diseñados para la hostelería, que recoja las necesidades del consumidor, tanto desarrollos concretos de productos como de formatos.
Lo que aporta el agua
Aunque si se piensa en Pascual, se piensa en leche, la compañía tiene en su catálogo de productos la marca Bezoya, de agua mineral, que es una de las piezas más potentes de la empresa. “La leche representa el 40% de la facturación, pero solo supone un 8% del ebitda. El café es un 10% de los ingresos y aporta un 15% en resultados. Y, en el caso del agua, es más llamativo: aporta el 20% de las ganancias, pero es el 50% del resultado antes de impuestos”, explica Vargas. Es por esto que es uno de los productos en los que quieren apostar para crecer. En concreto, Bezoya tiene una cuota de mercado del 6,1% en volumen y del 10% en valor, según los datos de la empresa. En el 2023, la empresa cerró con una facturación de 140 millones de euros, un 2% más que en el año anterior y aspira a alcanzar los 150 millones de euros de facturación en este año. El mercado de las aguas minerales crece al 8%, según el grupo, por la mayor “tendencia al autocuidado” en la sociedad. Para apuntalar este crecimiento no necesitan ampliar sus instalaciones, dado que las actuales aún les permiten un incremento de la producción del 20%, hasta los 800 millones de litros.