Tal vez Hitachi Rail suene lejano al lector, pero todo cambia si explicamos que se trata de la compañía propietaria del famoso tren bala japonés o del modelo Frecciarossa (flecha roja), con el que presta servicio en España Iryo.
La multinacional japonesa presente en 70 países y múltiples divisiones y que cerró el 2024 con una facturación de 67.098 millones de dólares, desembarcó en la primavera del 2024 en el negocio del ferrocarril español con la adquisición del negocio ferroviario de Thales, antigua Alcatel, por 1.660 millones de euros. Tras un periodo de adecuación a la realidad española, ya ha puesto en marcha su estrategia para ganar cuota de mercado en el país que sus directivos definen como “el más complicado del mundo desde el punto de vista de la competencia ferroviaria”, pero también uno de los que cuenta con unos planes de inversión muy potentes, 24.200 millones entre el 2024 y el 2028; 8.000 millones de planes propios de los fondos Next Generation y otros 3.000 para impulsar el ferrocarril de mercancías. Planes en los que Catalunya es uno de los territorios que mayores posibilidades de crecimiento ofrece.
La multinacional japonesa adquirió el negocio ferroviario de Thales en España en la primavera del 2024
Eso no significa que estemos ante un nuevo operador ferroviario dispuesto a competir con Renfe, Ouigo e Iryo en el transporte de viajeros. No es ese el terreno en el que puede moverse Hitachi Rail en España, porque pese a la fuerza de sus dos potentes trenes, el acuerdo firmado con Iryo impide ofrecer sus “flechas rojas” a otras compañías o explotarlos ellos mismos en Europa, y la tecnología del tren bala japonés no es trasladable al mercado occidental.
La vía del crecimiento de Hitachi Rail en España discurre por el mismo trayecto que lo ha hecho la antes conocida como Thales o Alcatel, es decir, en el negocio de la señalización de las vías férreas y control de trenes, el control y la supervisión del transporte, los sistemas de pago, seguridad digital o telecomunicaciones. “En esos ámbitos hemos estado muy presentes desde 1992 en todo el despliegue de la red ferroviaria de alta velocidad en España, tanto en la señalización de las vías como en los sistemas de seguridad de los trenes, y es en ese campo en el que podemos aportar una gran experiencia y en el cual queremos seguir estando”, asegura Carlos Mezquita, director general de Hitachi Rail en España.
Ha instalado la seguridad y las telecomunicaciones de la estación de alta velocidad La Sagrera
Con clientes como Iryo, Adif, Metro de Madrid, Bilbao y València, Puertos como los de Huelva, Málaga o Marín y diversos trenes regionales. El negocio de Hitachi Rail España en el 2023 se situó en los 840 millones de euros procedentes de sus 18 sedes en el país y sus tres factorías de producción de material eléctrico (Bilbao, Córdoba y Zaragoza). Aunque tienen interés en crecer en toda España, Catalunya, y en concreto Barcelona, es uno de los destinos que miran con especial atención. “Tenemos especial interés en acudir a las licitaciones que se esperan en el puerto de Barcelona, un nodo logístico clave en el transporte de mercancías. En particular, destacamos el potencial del centro de gestión ferroportuario de Barcelona, así como la futura terminal intermodal del Port de Barcelona, donde vemos una oportunidad significativa para implementar soluciones avanzadas en infraestructura ferroviaria y garantizar una mejor integración con la red de Adif”, desgrana Mezquita.
En el radar Hitachi también tiene detectado el negocio que va a generar la actualización de las redes del Metro de Barcelona y de Rodalies. “Queremos contribuir activamente a la modernización del transporte ferroviario con soluciones de vanguardia en señalización, seguridad, centros de control y sistemas de información al pasajero”, aseguran. Aunque antes que estas llegarán diversas licitaciones del Metro de Barcelona para actualizar su red. A esas licitaciones concurrirán con toda una mochila de experiencia que acumulan en la comunidad, en la que trabajan con 25 proveedores locales (en total el 91% de todos sus proveedores son españoles) y tienen bajo su control, entre otros proyectos, la seguridad del tramo ferroviario de alta velocidad que discurre entre Lleida y Francia, donde también realizan el mantenimiento de las instalaciones de seguridad y telecomunicaciones. Servicios que también acaba de poner en servicio en la línea que discurre por la nueva estación de alta velocidad, La Sagrera.
Hitachi Rail también ha puesto su sello en el mantenimiento y actualización de la línea Figueras-Perpiñán y en las instalaciones de seguridad del tramo de servicios de mercancías Maçanet-Girona. En Rodalies su única actividad en la actualidad se concentra en la gestión del tramo Montcada i Reixac-Maçanet. “En total nuestra actividad en Catalunya actualmente está muy acotada. No fue así en anteriores ejercicios, pero en el 2023 aportó en torno al 10% del negocio de 190 millones que tenemos en el mercado doméstico español; de ahí nuestro interés por tener una mayor participación”, asegura Mezquita.
