El sector innovador español no quiere quedarse de brazos cruzados ante los desafíos geopolíticos y tecnológicos que vienen por delante. Desde hace meses, las startups españolas trabajan por tener una voz propia que defienda sus intereses dentro y fuera del país. Nunca antes habían trabajado de forma tan coordinada. Cada hub , o cada ciudad, solía ir por libre.
“Nos hemos dado cuenta de que es mejor unir fuerzas porque los desafíos tecnológicos que presenta la IA y la tecnología cuántica son de gran envergadura”, comenta Miquel Martí, consejero delegado de Tech Barcelona, la mayor asociación de empresas emergentes de la ciudad catalana.
Así que después de años actuando por su cuenta, varias asociaciones empresariales de referencia han empezado a remar en la misma dirección. En los últimos meses, la patronal Adigital, Tech Barcelona, Endeavor, EsTech, SpainCap y la valenciana StartupVLC han presentado propuestas conjuntas ante la Unión Europa y el Gobierno central.
Reclaman mejoras fiscales, un mayor reconocimiento de las startups, y concretamente de las scaleups –empresas tecnológicas en fase avanzada de crecimiento– y piden la construcción de un relato único que coja fuerza entra la opinión pública y las autoridades.
Desde Barcelona se abraza la idea de ir todos a una para tener más fuerza al reclamar nuevas medidas
“Nos inspiramos en el modelo francés de emprendimiento, llamado French Tech , donde todos los actores privados trabajan a la una y reciben una fuerte ayuda de la administración pública. También Alemania, Estonia, Suecia o los Países Bajes tienen planes de actuación conjunta y consideramos que España no puede quedarse atrás”, comenta César Tello, consejero delegado de la asociación empresarial Adigital.
Desde Barcelona no hay temor a que el modelo español se construya inspirándose en el sistema centralista francés. “Tanto las startups de Barcelona como las de Valencia tenemos un papel activo y nos sentimos arropadas por esta iniciativa”, comenta Martí. En este sentido, las demandas de las startups de Barcelona son compartidas por todas las empresas emergentes del país sin que ello implique desatender la protección de sus singularidades, como las instituciones vinculadas con la cuántica y la IA, capitaneadas por el Barcelona Supercomputing Center (BSC).
El sector privado quiere un diálogo más estrecho con el sector público para captar oportunidades
Ante la Unión Europea, las asociaciones españolas piden un mayor reconocimiento de las scaleups como campeones nacionales y europeos. Reclaman que estas empresas tengan derecho a acogerse a exenciones fiscales y recibir financiación pública si atraviesan situaciones críticas porque son consideradas empresas estratégicas. Asimismo, reclaman a Bruselas una ley europea que favorezca la inversión a empresas emergentes y potencie el rol de los inversores institucionales, como los fondos de pensiones o los grupos aseguradores.
Ante el Gobierno central, Adigital ha elaborado una propuesta que pretende crear una alianza entre el sector privado digital y el sector público para trabajar de forma coordinada y así poder acceder a mayores oportunidades de crecimiento. La iniciativa está bautizada bajo el nombre de Alianza España Tech. El objetivo, comentan fuentes de la patronal, consiste en establecer un marco de diálogo estrecho y fluido entre asociaciones e instituciones públicas, como el propio Gobierno, pero sobre todo entidades de inversión como el Icex, Cdti o Enisa, a las cuales las startups acuden a menudo a solicitar créditos y subvenciones. En ningún caso, comentan, el objetivo de Adigital es crear un “chiringuito”, ni una nueva institución u organismo, sino limitarse a mejorar los canales de comunicación entre los distintos agentes implicados. De nuevo, entre las cuestiones más urgentes que el sector digital quiere abordar con el Gobierno central está la figura de la scaleup y la mejora de los incentivos fiscales para los inversores.