“Estamos sufriendo una competencia desleal derivada de una entrada masiva de materiales reciclados procedentes de Asia, donde los estándares medioambientales y laborales son, en muchos casos, considerablemente más laxos”, denuncia Ion Olaeta, presidente de la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER) y vicepresidente de la división europea de plásticos de la European Recycling Industries’ Confederation (EuRIC). Estas declaraciones, pronunciadas con motivo del 22.º Congreso de la Recuperación y el Reciclado, se producen en un momento especialmente complejo para la industria del reciclado de plástico europea.
“En España aún no se han registrado cierres por la tipología del sector, con empresas de largo recorrido, pero en el resto de Europa han cerrado 24 instalaciones en los últimos dos años”, advierte Óscar Hernández Basanta, director general de la Asociación Nacional de Recicladores de Plástico (Anarpla). La facturación del sector en Europa cayó un 12,5% en el 2023 y no se prevé que la capacidad de reciclado aumente este ejercicio.
El plástico reciclado tiene una huella de carbono 14 veces inferior al virgen
“No pedimos un trato de favor, sino el mismo trato para todos porque no es lo mismo lo que se exige a la industria local que lo que se exige al plástico que procede de Asia, con lo que somos totalmente incompetitivos”, se lamenta Alicia García-Franco, directora general de FER. La directiva denuncia también falta de controles a las exportaciones. Coincide el responsable de Anarpla, quien tacha las importaciones de “poco transparentes”. “Se han detectado certificados fraudulentos, pero también certificados con niveles de reciclaje que, en principio, cumplen con los requisitos, pero que en base a los conocimientos del sector no son posibles de alcanzar”, asegura Hernández. “Es necesario –continúa el experto– reforzar los controles en las importaciones, revisar el modelo de certificación, de responsabilidad, y de control a las certificaciones; no podemos penalizar al sector nacional por ser más fácil de controlar”.
Otras de las problemáticas que vive el sector son, según el directivo de Anarpla, “inseguridad jurídica, volatilidad de los precios y de la demanda, el bajo precio del plástico virgen, falta de incentivos para el reciclaje, burocracia, el incremento de los costes energéticos y alta competencia por el residuo”. “Se nos empiezan a escapar residuos fuera de la Unión Europea por falta de competitividad, con un aumento de las exportaciones del 36%”, añade el experto.
La industria del reciclaje de plástico española, que es la segunda en capacidad de Europa y la primera en capacidad instalada por habitante, opera a menos del 70% de su capacidad. “Somos importadores netos de residuos plásticos a reciclar por la gran capacidad de reciclaje instalada, pero también por la poca recogida selectiva, con una gran cantidad de residuo que acaba en un vertedero o es incinerado”, indica Hernández.
El director general de Anarpla urge a “actuar ya por motivos ambientales, económicos y estratégicos como país que no tiene plástico y que debe importarlo”. Ambientales, para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero responsabilidad de los vertederos, la incineración de residuos y la extracción de nuevos recursos. “Estamos hablando que un plástico reciclado frente a uno virgen reduce la huella de carbono de las materias primas hasta 14 veces”, indica Hernández. Económicos por el desperdicio de recursos que supone el desechar el plástico usado, así como por el riesgo de pérdida de empleos en un sector, el del reciclaje de plástico, que crea entre 30 y 40 empleos por cada 10.000 toneladas, frente a uno o dos empleos que se generan en un vertedero.
Con los vehículos hemos topado
El 80% de los plásticos procedentes de vehículos al final de su vida útil son desechados en vertederos o incinerados, “lo que genera enormes pérdidas de materiales, energía y eficiencia climática”, advierte la European Recycling Industries’ Confederation, quien señala que “es crucial contar con un marco regulatorio sólido”. La UE está trabajando en la redacción de este marco regulatorio.