Diciembre tiene sus días de ansias, de revisar la cuenta continuamente para ver si ya se ha cobrado la paga extra. Los gastos de la campaña navideña y la cercanía de la cuesta de enero llevan a muchos a lanzarse a gastarla sin mayor contemplación. Gran error según los expertos, que llaman a gestionarla como un salario más, aprovecharla para hacer colchón y usarla para cancelar deudas si se da la situación.
Elisabet Ruiz Dotras, profesora de Economía y Empresa de la UOC y experta en finanzas personales, compacta estas ideas. “En teoría tendría que haber una planificación financiera de los ingresos. La extra debería tomarse en el cómputo del año, planificar todo el año, y no gastar la de verano en vacaciones y la de Navidad en regalos”, repasa. “Siempre hay que destinar una parte del salario a ahorro, se suele hablar de un 20%. Si no hemos ido ahorrando, habría que guardar toda la extra”, comenta.
Valorar en qué situación llega uno es una idea en la que incide Javier Montaraz, director general de Grupo Bárymont, de asesoramiento financiero. “Como norma general lo correcto sería ahorrar la paga extra íntegramente si no dispones de un fondo de emergencia –de 3 a 6 meses de gastos básicos– o si tienes deudas cuyas condiciones indiquen que debes cancelarlas lo antes posible”, sostiene. Si uno ha ido haciendo los deberes en el año, “podrías ahorrar una parte y gastar otra”. Para saber cómo dividirlo, entrarán en juego los objetivos vitales de ahorro e inversión de cada uno y la velocidad con la que se quieran conseguir, señala. “La extra es una oportunidad excelente para avanzar objetivos financieros sin afectar al día a día. Lo que ahorres hoy e inviertas correctamente te proveerá mañana de muchas pagas extras”, concluye. Por ejemplo, si los objetivos de vivienda o educación son prioritarios recomienda ahorrar hasta el 70% de lo cobrado.
La fórmula clásica apunta que de los ingresos el 50% tiene que ir a cubrir necesidades básicas, donde entra un 30%-35% para vivienda y también se cuenta la alimentación. Otro 30% va a gastos personales y ocio, con el 20% restante para ahorro. “Si se cumple no tendría que haber problemas en llegar a fin de mes... Pero hacerlo es cada vez más difícil, tanto por el encarecimiento de la vivienda como de la cesta de la compra. Sea un 10%, sea un 5%, al menos algo hay que ahorrar. La idea con los ingresos es no recortar de ahorro, sino de gasto personal u ocio –como salidas o vacaciones–”, expone Ruiz Dotras. Para asegurar el tiro, en Bárymont proponen darle la vuelta al pensamiento habitual y ahorrar antes de gastar. Es decir, separar antes una cantidad y no esperar a ver qué sobra a final de mes.
Las luces navideñas ponen a prueba la teoría. En estas fechas los españoles gastarán hasta 800 euros por persona, según las cifras de los estudios que se han ido publicando estas semanas. Regalos y cenas se llevan la mayor parte. Si irremediablemente la paga extra va a cubrir compras, “hay que acordarse de definir un presupuesto concreto y no gastar más de lo marcado”, alerta Montaraz.
Si no se tiene un fondo de emergencia, se recomienda ahorrar el 100%, y siempre como mínimo un 20%
Si se arrastran deudas, la extra es buena ocasión para cancelarlas. Desde la UOC no ven el endeudamiento malo per se, siempre que se planifique bien y se pueda asumir con los ingresos que se tienen. “Si el crédito no tiene coste está bien, pero si tiene implica más riesgo”, dicen, porque al final una deuda pueda arrastrar a otra si no se gestiona. Como sea, la paga extra no es algo que llegue a todos. El cobro del salario en 12 pagas se extiende en muchas de las ofertas de trabajo actuales, sobre todo en posiciones nuevas, empresas extranjeras o con estructuras más internacionalizadas. Para ellos la planificación es igual de primordial, ahorrando a lo largo del año para tener capacidad de afrontar picos de gasto como el verano y la Navidad, compara Ruiz Dotras.
Regalar tiene su precio
Que las fiestas traen más gasto es innegable. Uno se puede dejar llevar más o menos: según Oney, especializada en soluciones de pago y servicios financieros, gastaremos una media de 411 euros en regalos, la partida más abultada estas fechas. La OCU menciona unos 370 euros, más de la mitad en Reyes. La organización llama a hacer listas y consultar las políticas de devolución para no sufrir sustos.


