La facturación de los establecimientos hosteleros en España cerrará 2024 con un crecimiento del 6%, respecto de los 157.379 millones de euros de ingresos del sector en 2023. En este alza, destaca Cataluña, que dispara su facturación hostelera un 16% en los nueve primeros meses del año y que cerrará muy por encima de la media del resto del país
Emilio Gallego, secretario general de Hostelería de España, ha explicado que “las diferencias entre comunidades autónomas se agrandan” en cuanto a facturación de la hostelería. En concreto, en 2023, seis comunidades autónomas concentraron tres cuartas partes de la facturación de toda la hostelería, con Cataluña a la cabeza con 26.787 millones de producción hostelera, el 17% del total. Le siguen Andalucía, Canarias, Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana y Baleares, que suman el 75% de toda la facturación de la hostelería.
El crecimiento del empleo y la bajada de los tipos de interés permitirán un 2025 también positivo
Gallego explica esta diferencia, que se agranda, por la exposición de estas comunidades autónomas al turismo internacional y porque albergan grandes ciudades. La demanda nacional ha tocado techo sin embargo y esto lastra a comunidades como Castilla y León.
La combinación de ciudades y turismo asegura no solo los buenos datos pasados sino unas expectativas altas de seguir creciendo, como marca el dato de que en 2024, Cataluña mantendrá su primera posición. En tanto que la afluencia de visitantes extranjeros se mantenga al alza, también se mantendrán las perspectivas del sector. De ahí que para 2025 estas sigan siendo positivas.
“Mientras la economía española siga generando puestos de trabajo, tenemos una perspectiva buena. Los tipos de interés están a la baja y las perspectivas de turismo internacional siguen siendo muy positivas. Tendremos un 2025 positivo”, ha dicho Gallego. El crecimiento estimado se coloca entre el 3% y el 4%.
En líneas generales, la hostelería está moderando ya sus crecimientos respecto de los años de salida de la pandemia, cuando incrementaba su facturación a doble dígito por el ascenso de la demanda nacional, que ha caído. “Estamos en una situación de normalidad. Va a ser un año bueno, porque la temporada y la Navidad viene dentro de lo normal”, ha asegurado Gallego.
En concreto, de esta forma, entre enero y septiembre la facturación de las actividades de hostelería registró un alza del 8,1% respecto al mismo período de 2023, aunque al eliminar el impacto de la inflación, la subida se sitúa en torno al 2,5%, según los indicadores de producción. En restauración el incremento es de un 7,1%, mientras que en el alojamiento el impulso es más acusado, con un incremento de un 10%.
Respecto al empleo, éste ha seguido una tendencia positiva, similar a la del año pasado, con cifras récord de trabajadores, lo que supone un aumento en el conjunto de las actividades hosteleras del 3,7% respecto a los mismos meses de 2023, superándose 1,9 millones de trabajadores durante cinco meses consecutivos que han supuesto la incorporación de 66.000 trabajadores adicionales respecto al año anterior.
La patronal hostelera ha advertido de que uno de los principales retos del sector es recuperar completamente la rentabilidad de muchos negocios, que se ha visto afectada por el incremento generalizado de los costes operativos.
Respecto a los precios de la hostelería, Gallego ha señalado que se van “ajustando” con la bajada de la inflación. “La evolución en los próximos meses serán más estáticos. Ese tsunami de precios ya ha impactado y vamos a un horizonte de mayor estabilidad”, ha indicado.

