Las afinidades políticas entre Donald Trump y Javier Milei pueden traducirse en un flujo de dinero. La Casa Blanca está dispuesta a echar un cable a Argentina. El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, aseguró este lunes que su país proporcionará un apoyo “grande y contundente” a la economía del país del Cono Sur, que atraviesa un momento turbulento.
Bessent adelantó que “todas las opciones de estabilización están sobre la mesa”. Entre ellas se encuentran líneas de swap –acuerdos de intercambio de divisas entre bancos centrales–, compras directas de divisas o compras de deuda gubernamental en dólares estadounidenses mediante el Fondo de Estabilización Cambiaria del Tesoro (como ya se hizo con México en 1995).
Por su parte, Milei agradeció a Bessent y a Trump su “apoyo incondicional” al pueblo argentino: “Los que defendemos las ideas de la libertad debemos trabajar juntos para el bienestar de nuestros pueblos”, aseguró el inquilino de la Casa Rosada.
El respaldo que busca Milei en Estados Unidos tiene como objetivo cubrir distintos pagos que debe afrontar Argentina durante el próximo año, un primero de 3.400 millones de euros en enero y un segundo de 3.800 millones en el mes de julio del 2026.
La prensa del país sudamericano especula con que Washington tiene un paquete de ayudas que oscila entre un mínimo de 8.500 millones de euros y 25.500 millones. Bessent calificó a Argentina como un “aliado estadounidense de importancia sistémica en América Latina”. El presidente de EE.UU., Donald Trump, tiene previsto reunirse hoy con su homólogo argentino.
Milei también espera reunirse con la titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, de quien ya recibió un crédito de 17.000 millones de euros el pasado mes de abril. El FMI es el mayor acreedor del país.
La bolsa argentina, con el índice Merval, llegó a apreciarse un 8% tras las palabras de Bessent y el peso anotó su mayor alza desde mayo. “Los activos argentinos necesitaban desesperadamente un cortocircuito, y acaban de conseguirlo”, afirmó Alejo Czerwonko, director de inversiones para mercados emergentes en América de UBS. “La intervención de Bessent tiene un peso desproporcionado en este momento frágil. Le brinda a la Administración Milei una ventana para reorientarse antes de las elecciones de octubre”.
El banco central argentino quemó cerca de 1.000 millones de euros en reservas la semana pasada para defender la moneda. Las denuncias de corrupción en el entorno del presidente Javier Milei y una derrota mayor de lo esperado en una elección local en Buenos Aires generaron preocupación sobre la estabilidad económica del país.
