A la espera de que se defina el futuro de la conexión del tranvía por la Diagonal, la Generalitat anunció ayer por sorpresa su compromiso con la construcción de un nuevo ramal del Trambaix entre Esplugues y Sant Just Desvern.
En el momento de la construcción del tranvía, hace más de una década, se desestimó la idea de seguir la línea más recta, a través de la carretera Laureà Miró, lo que convierte el trayecto entre Barcelona y Sant Feliu de Llobregat en un viaje de más de tres cuartos de hora que serpentea el Baix Llobregat.
La construcción del nuevo tramo, que tendrá un kilómetro de longitud y dos paradas intermedias, requerirá una inversión de 24,6 millones de euros. Se prevé que el proyecto esté redactado de cara al 2020. Con todo, la importante actuación en uno de los ejes más importantes para la movilidad interna de Esplugues supondría un ahorro de menos de cinco minutos a los usuarios del tranvía.
El acuerdo alcanzado entre la Generalitat y el Ayuntamiento de Esplugues determina que sea la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) quien se encargue de redactar los estudios y proyectos necesarios para el nuevo ramal de la línea T3 del Trambaix.
En paralelo, y sin que una cosa sustituya a la otra, el conseller de Territori, Josep Rull,
firmó ayer un acuerdo en el que compromete la prolongación de la línea 3 de metro desde Zona Universitària hasta el centro de Esplugues pasando por
el hospital Sant Joan de Déu.
La previsión en este caso es tener el proyecto antes del 2020 e impulsar la programación de los 2,3 kilómetros de metro a partir del 2021 a la vez que se ejecuta el tramo central de la línea 9. La inversión estimada para esta actuación es de 180 millones de euros.