Passos Coelho tira la toalla tras el descalabro electoral
Las municipales hundieron al piloto del rescate portugués
Passos Coelho, ayer, tras anunciar su renuncia
La política de austeridad a ultranza se cobró ayer una nueva víctima, si bien con dos años de retraso. Tras el desastre de las municipales del domingo, Pedro Passos Coelho, de quien se decía que era el gobernante portugués que quería ser más alemán que los alemanes, tiró la toalla como líder del conservador Partido Social Demócrata (PSD), lo que supone que, en los próximos meses, cuando se celebre el congreso en el que no se va a postular a la presidencia, dejará de ocupar la jefatura de la oposición. Termina así un ciclo de siete años, marcado por el rescate de Portugal, que dejó a este pilar del bipartidismo luso hundido en la marginalidad en las dos grandes urbes del país, con apenas el 10% de los votos.