En el ecosistema audiovisual actual, donde las decisiones de producción suelen venir condicionadas por calendarios ajustados y métricas de impacto, 24 Violets ha decidido organizarse desde otro lugar. Esta productora independiente, fundada por Laura Muñoz, una guionista con experiencia en instituciones como el Ministerio de Cultura y Televisión Española, parte de una premisa poco habitual: el guion no es solo el punto de partida, sino el centro de todo el proceso.
El guion por encima de todo
“Siempre seré guionista por encima de todo, incluso por encima de ser productora o directora”, resume su fundadora. Esa perspectiva, más cercana a la escritura que al negocio, ha marcado desde el principio la manera de trabajar de la productora, que da forma a sus proyectos pensando no solo en cómo se rodarán, sino también en cómo se desarrollarán, en qué contexto se verán y en qué festivales quieren que tengan recorrido. Para 24 Violets, el desarrollo no es una fase intermedia, sino una estrategia creativa de largo aliento.

Stella Maris ha sido seleccionada en Locarno Pro Match Me!, dentro del marco industrial del Festival de Cine de Locarno
Ese cuidado por el proceso se refleja en el tipo de proyectos que llevan adelante. Stella Maris, por ejemplo, parte de un hecho real —el hundimiento del Buque ISLAMAR III de Isla Cristina, Huelva, cuyo naufragio en Islas Canarias en 1984 conmocionó al país— para construir un relato desde la perspectiva de las mujeres que esperaban en tierra. La película ha sido seleccionada en Locarno Pro Match Me!, dentro del marco industrial del Festival de Cine de Locarno, donde la productora ejecutiva Elisa P. Bogalheiro trabaja en el desarrollo de esta coproducción entre Portugal y España. El proyecto combina la reconstrucción histórica con una mirada íntima sobre los cambios sociales que atravesaba entonces la sociedad andaluza, acompañado por una banda sonora original de Pepe Begines. “Stella Maris es una experiencia en la que se respira ilusión, donde se pretende reflejar el carácter sureño de la historia desde una perspectiva universal, y que cuenta con un ramillete de músicos y artistas de primera línea”, destaca Begines.

24 Violets quiere reforzar un método de trabajo que respeta los tiempos de creación y la especificidad de cada historia
Otro de sus títulos, Los débiles, aborda la pérdida de la infancia desde un registro más cercano al thriller. Escrito por Enric Rufas, uno de los guionistas más premiados del país, el proyecto se sirve del género para hablar de emociones que se desdibujan en la vida adulta y miedos contemporáneos que rara vez encuentran lugar en la ficción comercial.
Esta combinación de géneros y temas responde a una idea muy concreta de producción: contar historias que puedan sostenerse por sí solas, sin depender de grandes presupuestos ni de modas pasajeras, pero que estén construidas con el suficiente rigor narrativo como para tener recorrido dentro y fuera de España.

Buena parte del equipo está formado por mujeres
La apuesta de 24 Violets no es solo narrativa. También se refleja en cómo está organizado su equipo. Frente a la rotación constante de perfiles que caracteriza a muchas productoras, aquí se ha optado por consolidar una estructura estable, con un núcleo creativo que trabaja en varios proyectos a la vez y comparte información de forma transversal. “Todos están al tanto de todo”, explican desde el equipo, en referencia a un modelo de trabajo donde cada integrante entiende el lugar de su tarea dentro del conjunto.
Buena parte del equipo está formado por mujeres mayores de 50 años, muchas de ellas profesionales con experiencia que, por distintas razones —familiares, económicas o de contexto— no habían tenido la oportunidad de desarrollarse plenamente en la industria. Lejos de tratarse de una estrategia puntual, esta decisión responde a una convicción: hay una generación de mujeres con mucho que aportar, y pocas estructuras que les permitan hacerlo.

24 Violets se posiciona como una de las primeras productoras en adoptar un enfoque de transformación digital de 360º con la IA como eje central
Aunque 24 Violets mantiene un formato pequeño, tiene una clara vocación internacional. La compañía ha establecido alianzas con socios en México, Brasil y Portugal, lo que les permite pensar proyectos tanto desde una lógica local como en clave de coproducción. Esa red les permite sostener una estructura contenida, pero con capacidad para crecer cuando el proyecto lo exige. Entre los títulos en desarrollo figuran Cordilleras del Olvido, un documental sobre el pintor Ricardo Castillo y primer proyecto en el que la productora incorpora Inteligencia Artificial, así como el biopic sobre la bailaora Cristina Hoyos, que busca explorar nuevas formas de narrar desde el flamenco y desde una figura clave en la historia cultural reciente del país.
Con esta apuesta, 24 Violets se posiciona como una de las primeras productoras en adoptar un enfoque de transformación digital de 360º con la IA como eje central, lo que supone una ventaja competitiva y marca un precedente sobre cómo la tecnología puede impulsar la industria cultural y audiovisual desde una base sólida, estratégica y escalable. Esta línea de trabajo es posible gracias a la colaboración con Aiencia Solutions, liderada por Mario Mazaira, mentor experto en Big Data, y Etechan Butt, especialista en desarrollo de tecnología disruptiva.
Respetar los tiempos de creación y la especificidad de cada historia
A medio plazo, 24 Violets aspira a consolidar un modelo de estudio con un equipo de guionistas propio, capaz de generar contenido de forma continuada y con mayor autonomía. El objetivo no es escalar por escalar, sino reforzar un método de trabajo que respeta los tiempos de creación y la especificidad de cada historia.