Romanos y griegos observaban con atención las erupciones del Etna, que ayer volvió a la actividad, algo que no ha sido extraño en los últimos años, pero que se suma, como un signo más, a la convulsa climatología que se ha apoderado de nuestras vidas. Un signo, también, de los furiosos días que vive la actualidad, sobre todo a cuenta de la guerra de Ucrania, del conflicto de Gaza y de su posible extensión al Líbano.
Las imágenes del día nos muestran diferentes caras de estos conflictos: desde las madres que lloran a sus muertos en Ucrania, hasta las manifestantes en Israel contra la política de Netanyahu que enarbolan fotos del famoso rehén Evyatar David, obligado a cavarse su propia tumba, o a la crisis alimentaria en Gaza, que afecta no solo a los humanos sino también a los animales, como los gatos, para quienes sus dueños intentan guardar algunos de los escasos víveres restantes, por cuya obtención muchos mueren cada día.
Desde Asia, que se mantiene un tanto ajena a estos conflictos, nos llegan imágenes demostrativas del creciente poderío tecnológico de naciones como Corea del Sur y Pakistán. En el caso coreano, han comenzado las festividades que culminarán el día 15 de agosto (en esa fecha de 1945 se liberó la península coreana de la dominación japonesa) y una gran exhibición de drones sirve para recordar a los luchadores por la independencia. En el caso pakistaní, se celebra el fin del yugo británico un día antes (el 14 de agosto de 1947), pero sus grandes edificios ya muestran estos días su versión más festiva y luminosa.
En España, con un estilo más tradicional, se ha celebrado por todo lo alto el Día de Cantabria, mientras que el deporte también aporta su granito de arena a la fiesta con las medallas procedentes del Europeo sub-20 de atletismo de Tampere.