El escenario mundial se dibuja con una intensa paleta de luces y sombras. En Masaya, Nicaragua, la cultura popular alcanzó su cénit con la ancestral y sobrecogedora celebración del carnaval de Los Agüizotes, un despliegue de fantasmas, diablos y mitos populares. Simultáneamente, el Caribe se enfrentó a la furia indomable de la tormenta tropical Melissa. El fenómeno, con su movimiento incierto, ha provocado la muerte y graves inundaciones en Santo Domingo, obligando a ciudadanos y animales a buscar desesperado refugio.
La realeza española, por su parte, honró la tradición en Valdesoto, donde el rey Felipe VI y la princesa de Asturias premiaron el espíritu ejemplar de la comunidad. En contraste, en Abiyán se celebraban elecciones presidenciales, mientras que la guerra dejaba su huella de fuego en Kyiv por ataques con misiles rusos. La protesta contra los aranceles de Trump en Seúl y el deporte global, desde la Fórmula Uno hasta el cricket, completan este fresco de un planeta en constante movimiento.













































