No hay un calzado más famosos en la historia del cine. Los zapatos de rubí que Judy Garland lució en su papel de ‘Dorothy’ en El Mago de Oz (1939) son un mito del vestuario de Hollywood y su valor es incalculable. Al menos lo era hasta ahora.
Los míticos zapatos capaz de mandar a Dorothy a casa con tres golpes de talón y la frase “no hay lugar como el hogar”, que fueron robadas hace casi dos décadas y halladas por el FBI en 2018, se vendieron el sábado durante una subasta por 28 millones de dólares. La venta no ha podido llegar en mejor momento después del éxito del estreno mundial de Wicked, la precuela del clásico musical de fantasía protagonizada por las intérpretes estadounidenses Ariana Grande y Cynthia Erivo.
Heritage Auctions había estimado que los zapatos alcanzarían los tres millones de dólares, pero ya en la puja rápida superó con creces esa cantidad. Incluyendo los honorarios de la casa de subastas con sede en Dallas, el comprador desconocido finalmente pagará 32,5 millones de dólares convirtiendo estos zapatos, según explicó en un comunicado difundido en la CNN el vicepresidente de relaciones públicas de la casa de subastas, Robert Wilonsky, en el “tesoro cinematográfico más valioso del mundo y han logrado que esta sea la subasta de artículos de entretenimiento más exitosa jamás realizada”.
Billie Birke como Glinad, la bruja buena del Mago de Oz, estrenada el 1939
El par vendido fue uno de los varios que usó Garland durante el rodaje. Se cree que sobrevivieron cuatro. Este ejemplar en concreto se exhibía en el Museo Judy Garland en su ciudad natal de Grand Rapids (Minnesota) cuando Terry Jon Martin usó en 2005 un martillo para romper el cristal de la puerta y la vitrina.
Su paradero fue un misterio durante más de una década, hasta que el FBI los recuperó en 2018. Martin (77 años), no fue expuesto públicamente como el ladrón hasta ser acusado en mayo de 2023. Se declaró culpable en octubre de ese mismo año. Estaba en silla de ruedas y con oxígeno cuando fue sentenciado a tiempo cumplido debido a su mala salud.
La subasta incluyó otros recuerdos del musical, como el sombrero de la Malvada Bruja del Oeste por 2,4 millones de dólares
Su abogado, Dane DeKrey, explicó previamente a la sentencia que Martin, que tenía un largo historial de robo, estaba intentando realizar su último gran golpe después de que un antiguo asociado con conexiones en la mafia le dijera que los zapatos tenían que estar adornados con joyas reales para justificar su valor asegurado de un millón de dólares. Sin embargo, como los rubíes de los zapatos estaban confeccionados con vidrio, Martín se deshizo de ellos. Como dijo Rhys Thomas, autor de Las zapatillas de rubí de Oz, los zapatos con lentejuelas del querido musical de 1939 han dado “más vueltas y vueltas que el camino de ladrillos amarillos”.
La subasta incluyó otros recuerdos y tesoros del musical de El Mago de Oz, como el sombrero que llevaba Margaret Hamilton, quien en la cinta interpretó a la Malvada Bruja del Oeste. Un artículo que alcanzó la respetable cifra de 2,4 millones de dólares, con un coste final total para el comprador de 2,93 millones de dólares. Una subasta mediática con artículos que han marcado la historia del cine.