David Fernández (54), el humorista y actor catalán, es más conocido como 'Rodolfo Chikilicuatre'. El año 2008 marcó un antes y un después en su vida, ya que representó España en Eurovisión con la canción Baila el chiki chiki.
Gracias a su actuación en el famoso festival de música, el de Igualada, consiguió mucha fama. Desde entonces, David ha participado en varios programas de televisión, como Tu cara me suena, MasterChef Celebrity o LOL: si té ríes pierdes.
David Fernández en Eurovisión
El humorista creó el personaje de 'Chikilicuatre' en el programa Buenafuente. Allí conoció Edu Soto, otro cómico catalán que interpretaba 'El Neng de Castefa'. Durante años, los dos trabajaron juntos y se hicieron muy amigos.
Hace dos años que Fernández y Soto hicieron un docu-reality juntos en Cuatro, titulado Dos de los nuestros. Los dos humoristas catalanes emprendieron un viaje en furgoneta por España en busca de nuevas experiencias.
Edu Soto i David Fernández en Cuatro
'La ruina'
La surrealista historia de David Fernández y Edu Soto
Este miércoles, 26 de marzo, David Fernández ha visitado el pódcast La ruina y ha explicado cómo se jugó la vida por culpa de su compañero y amigo Edu Soto. Su historia se remonta en el 2010 en las afueras de Madrid: “Soto se perdió”.
Iban los dos solos en coche y acabaron en un descampado. “Edu aparcó al lado de un coche negro que había allí y bajó del coche para hablar por teléfono. Yo oía un ruido muy extraño y me quería ir...”, detalla el de Igualada.
Cuando Soto colgó el móvil, le preguntó a David si oía el ruido y decidió acercarse al otro coche para abrir el maletero: “Dentro había una chica atada de pies y manos, con una cinta en la boca (...) Le sacamos la cinta y habló en ruso”.
Más tarde, la chica les ofreció bombones y Soto comió. “De repente, aparece un coche negro en el descampado y la rusa se esconde dentro de nuestro coche”, comenta Fernández. Los cómics llamaron a la policía y enseguida llegó.
David Fernández en 'La ruina'
Resulta que la policía estaba compinchada: “Me dijeron que los rusos tenían brillantes dentro de los bombones (...) Se llevaron a Edu para que los cagara y yo no paraba de pensar que nos querían matar, pero que al menos había ido a Eurovisión”.
“Más tarde, apareció otro coche más y bajó un hombre con un ramo de flores para cantarme la canción de Gala inocente, inocente”, exclama el catalán. El programa de televisión le quiso gastar una broma y él se la comió con patatas.
