La princesa Leonor ha pisado de nuevo territorio chileno, tras la llegada del Elcano, este viernes, a Valparaíso, su primera escala en un puerto del Pacífico después de cruzar los canales patagónicos, tras zarpar de Punta Arenas el pasado 23 de marzo. En los once días de navegación, la Princesa ha sido noticia en tierra por la aparición de sus fotografías disfrutando de un día de playa durante la escala en Montevideo y la denuncia interpuesta efectuada por el Servicio de Seguridad de la Casa del Rey a un centro comercial de Punta Arenas por haber facilitado imágenes de sus cámaras de seguridad de Leonor y sus escoltas mientras paseaban por las galerías.
La escala en Valparaíso se presenta más tranquila; con temperaturas entre los 9º y los 19º, los guardiamarinas pueden visitar el cercano balneario de Viña del Mar y la ciudad cercana a la capital, Santiago, pero no disfrutar de la playa, siempre en sus días libres, si no tienen que cubrir las guardia a bordo que son con un ritmo de un día o noche de cada dos.

Leonor a su llegada a Valparaiso (Chile) este viernes
El Elcano ha atracado en el puerto chileno envuelto en una densa niebla, y bajos los acordes de la unidad de música de la Armada chilena. Eran las 8 de la mañana en Valparaíso (las 13h en la España peninsular) cuando el buque-escuela ha realizado la maniobra de atraque bajo la mirada, desde el muelle, de un grupo de oficiales de la Armada chilena.
Los guardiamarinas, entre los que se encuentra la princesa Leonor, y la tripulación del Elcano han saludado desde el barco, agitando las gorras de sus uniformes (el de invierno llamado 14 botones), mientras se oía música de pasodobles y finalmente el himno nacional.

La princesa, tras el saludo de bienvenida, baja a la cubierta inferior del Juan Sebastián de Elcano, que este viernes atracó en el puerto de Valparaíso
La escala en Valparaíso tiene una particularidad, ya que en el puerto el Juan Sebastián de Elcano se ha encontrado con el Esmeralda, su buque-escuela gemelo que fue entregado a Chile por España en pago de una deuda y en el que los guardiamarinas chilenos realizan su crucero de instrucción. Ambos barcos fueron construidos en astilleros de Cádiz, pero mientras el español entró en servicio en 1928, el chileno lo hizo en 1954. El lunes, la princesa Leonor y sus compañeros visitarán la escuela naval Arturo Prat de la Armada chilena donde confraternizarán con los guardiamarinas del Esmeralda.
Como en el resto de las escalas, el comandante del buque, capitán de navío Luis Carreras-Presas do Campo, ha bajado a tierra siendo recibido por su homólogo chileno y, en declaraciones que recoge la agencia Efe, comentó los detalles de la derrota seguida desde la ciudad meridional chilena Punta Arenas, su escala previa, en el complejo estrecho de Magallanes.
“Tienen ustedes un país precioso para navegar”, afirmó el oficial antes de expresar el privilegio que es para cualquier marino recorrer la gran cantidad de islas, fiordos y glaciares que salpican la costa sur del Pacífico chileno.

La princesa Leonor baja del 'Juan Sebastian de Elcano' al muelle del puerto de Valparaíso
“Se aprende mucho, el mar chileno es muy buena escuela para el aprendizaje de los guardiamarinas”, dijo Carreras-Presas antes de regresar a cubierta para presidir el “saludo a la voz”, ceremonia de bienvenida al embajador de España en Chile, Rafael Garranzo, quien subió a bordo para dar la bienvenida a los guardiamarinas y saludar a la princesa de Asturias, .
El Elcano llegó el jueves y fondeó en aguas situadas entre Valparaíso y Viña del Mar, desde donde esperaron los permisos de las autoridades locales para iniciar la maniobra de aproximación, fondeado y atraque en el Molo de Abrigo del puerto de Valparaíso, donde permanecerá hasta el próximo 8 de abril, cuando volverá a remontar el Pacífico en dirección a El Callao (Perú).

Leonor y sus compañeros a su llegada a Valparaiso (Chile) este viernes
Para este sábado está prevista la ceremonia de jura de la bandera en la que pueden participar españoles que residen en Chile y una jornada de puertas abiertas, que se repetirá el domingo, donde podrán subir al buque los ciudadanos que lo deseen.
El lunes, los guardiamarinas asistirán a la inauguración de un busto del navegante español Blas de Lezo en la escuela naval Arturo Prat, en Valparaíso, y por la tarde acudirán a una recepción con la colonia española en Viña del Mar. El martes el barco zarpará rumbo a su segunda escala en el Pacífico, el puerto de El Callao, en Perú.