33 años de carrera profesional a sus espaldas, han convertido a Nieves Álvarez de una de las modelos españolas más reconocidas a nivel internacional. Tras décadas dedicada al mundo de la moda, continúa ligada a las pasarelas como una de las musas del conocido diseñador francés Stéphane Rolland.
Un buen momento profesional que ha querido complementar con su propia línea de cosméticos con el objetivo de establecer su marca en un amplio mercado. Y es que si hay algo que prioriza en su vida es el cuidado de su piel para poder mantenerse como ella quiere con el paso de los años.
Nieves Álvarez
“Cuando llegué a París con 18 años, lo primero que hizo mi agente fue enviarme a un dermatólogo. La piel es el lienzo con el que trabajamos, es la luz que proyectamos”, ha reconocido en su entrevista para Evasión de El Economista. Una forma de tener un rostro luminoso que, a su vez, le genera seguridad.
Por ello, a lo largo de los años ha buscado todo tipo de soluciones para poder mantener su cutis a la perfección, entre ellas, una fórmula “magistral” que le preparaba su dermatólogo de Madrid específicamente para ella. Y es que siempre se ha mostrado muy preocupada al respecto.
Nieves Álvarez: “El amor es el motor de la vida”
Una serie de cuidados que han mejorado su salud y que ha ido adoptando gracias a su trabajo. Toda una vida dedicada al mundo de la moda que también le ha servido para poder ser feliz en los peores momentos. “Gracias a la moda encontré el sentido de mi vida, y me ayudó mucho. Es un testimonio de que sí se puede. Hay luz al final del túnel”, se ha sincerado.
Pero antes de adentrarse en este mundo, tuvo que enfrentarse a los problemas de la anorexia, algo que también se vive de forma directa en la moda. Sin embargo, Nieves Álvarez ha querido dejar claro que su trabajo no tuvo nada que ver y que logró recuperarse antes de subirse a las pasarelas.
Nieves Álvarez y Bill Saad
Actualmente, la modelo se encuentra también muy feliz con su vida personal, que comparte junto al empresario Bill Saad desde 2021. Ambos se conocieron durante la fiesta de cumpleaños de un amigo en común y desde entonces no se han separado.
“El amor es el motor de la vida. El amor por todo lo que nos rodea, por lo que hacemos, por la gente a la que queremos y por nosotros mismos”, ha expresado con sinceridad.