A sus 51 años, y tras dos décadas retirado de los ruedos, Jesulín de Ubrique siente la ilusión y las ganas de volver a ponerse frente a un toro. El diestro reaparecerá en el festival taurino del municipio toledano de Aldea en Cabo el próximo 30 de agosto, y será allí donde toreará un novillo por las fiestas patronales de la localidad.
Pese a que tiene todo preparado para esta vuelta momentánea, le ha surgido un problema de salud que podría haber complicado su aparición en el ruedo. Tal y como ha relatado él mismo en la cuenta de Instagram de un centro de Sevilla, estaba notando problemas serios en su rodilla que ha tenido que solucionar lo antes posible.

Jesulín de Ubrique
“Estoy muy contento porque he venido con dolor, mucho dolor, venía también un poco preocupado por ver un poco cómo iba a ser todo este tema y el proceso de intervención”, ha empezado a relatar junto al doctor. “Me ha quitado radical las molestias, los dolores que tenía”, ha continuado.
Tal era el daño que sentía que ha tenido que superar uno de sus mayores miedos: los pinchazos. Jesulín de Ubrique ha podido dejar a un lado “pánico” a las agujas para poder mejorar su rodilla: “Era un dolor radiante que me fastidiaba lo más grande y, de momento gracias a Dios puedo salir vivito y coleando. Y, bueno, lo que tocará será la próxima revisión”.
Un vídeo que María José Campanario ha querido compartir en sus historias de Instagram, mostrando su apoyo a su esposo durante el proceso de recuperación. No es de extrañar que la odontóloga no se quiera separar ni un solo minuto de Jesulín en estos momentos, teniendo en cuenta el apoyo que recibe ella por su parte durante su enfermedad.
La esposa del diestro sufre de una fibromialgia que a veces se hace patente en una serie de brotes que le complican su día a día. Esta afección se caracteriza por ser crónica y afectar de forma generalizada, causando dolor en todo el cuerpo, a la vez que fatiga.