El título de ‘pantera en libertad’ se lo ha ganado a pulso, y no solo por la canción homónima que lanzó en 1997. A fin de cuentas, son ya más de treinta años los que lleva Mónica Naranjo brillando sobre los escenarios, logrando convertirse a fecha de 2025 en uno de esos rostros polifacéticos que, más allá de su portentosa voz, también se ha hecho un hueco en todo tipo de espacios. Véanse todas sus apariciones televisivas, en las que, sea cual sea su papel –entrevistada, jurado o presentadora–, nunca deja indiferente.
Cuestión de esa naturalidad que siempre ha ido de su mano a la hora de presentarse ante el público. De ahí que, durante una visita a El Hormiguero de Antena 3 el pasado 17 de marzo, no dudase en confesar a Pablo Motos un episodio de lo más escatológico que tuvo lugar minutos antes de un concierto. La causa, lejos de cualquier mística de estrella del pop, fue un atracón de fruta: “Me comí medio kilo de ciruelas… Y salí al escenario con la muerte llamando a la puerta”, bromeó entre risas.
“¡Sácame de aquí!”
La anécdota frutal de la catalana que pudo acabar en desastre escénico
Con esa mezcla de desparpajo y humor negro que es marca de la casa, la intérprete relató en el espacio de Trancas y Barrancas cómo aquel día, tentada por su lado más goloso, se dejó llevar por su amor por las frutas sin pensar en las consecuencias. “Soy muy golosa y me encanta la fruta. Tú me pones fruta, y la monito va y se la come”, explicó, generando carcajadas en el plató. La cuestión es que el asunto acabó torciéndose en pleno concierto, cuando las ciruelas empezaron a hacer efecto. “Salí del escenario, tenía al stage manager delante y le dije: ‘me cago… ¡Sácame de aquí!’”, recordó, provocando una oleada de risas que alcanzó incluso a las hormigas del programa.

Mónica Naranjo durante su visita a 'El Hormiguero'.
La escena fue tan gráfica como cómica, y no tardó en generar bromas entre colaboradores de otros programas de Atresmedia, como Iñaki Urrutia, que al día siguiente de ver la luz esta historia tiró de refranero improvisado para referir al tema durante su participación en Zapeando, en LaSexta: “Ciruela y concierto, dejas el baño con olor a muerto”. Al hilo, María Gómez, con retranca, añadió: “¿Creéis que eso inspiró el Sobreviviré?”. El caso es que, más allá de la sorna, la artista ya había reconocido en su charla con el presentador del access prime time que “se pasa mal”.
'Come y calla'
Una amante de la cocina terapéutica, para curar el alma y también el humor
Es de recibo poner sobre la mesa que no era esa la primera vez que la cantante vincula el estómago con las emociones. En octubre de 2013 publicó Come y calla, un libro de recetas con alma, aderezado de historias personales y pequeñas catarsis culinarias. “Ahora ya no tendrás la excusa de decir que no sabes cocinar, porque hasta un niño con un poco de voluntad podría preparar estos platos”, sentenciaba entonces al respecto, en un intento por desmontar los mitos de la cocina complicada. Por demostrar que, para ella, los fogones son territorio sagrado: “Entro en la cocina y, ¡zas!, todos los males se disipan, pura magia”.

'Come y calla', el libro de recetas que Mónica publicó en 2013.
Tan sencillo como que, dejando de lado las bromas, la conexión de la intérprete de Desátame con la comida no es casual. En su vida, marcada por giras, discos y focos, ha encontrado en lo doméstico un refugio inesperado en el que convierte en una cocinera sensible y creativa. Y como en sus canciones, también en su cocina hay intensidad, presente incluso cuando se anima con los postres, como sus tartas de chocolate, una de sus recetas estrella que podrían competir con cualquier balada. Versatilidad a la máxima potencia.