Acompañar a Belén Esteban y Xuso Jones a una visita por la destilería de Beefeater guiada por el maestro destilador Desmond Payne te transporta a una escena de la película Lost in translation a la británica. Jones traduce las palabras de Payne a Esteban, pero a ella, para responder, le vale con el body language. Las sinergias entre ingleses y españoles suelen ser desternillantes cuando se combina el descaro español con la impasibilidad de la flema británica. Y como Esteban tiene desparpajo para rato, el recorrido por la destilería londinense se vuelve un polvorín: “¡Las naranjas que usa Beefeater para su fórmula son españolas! ¡Viva España, Desmond! Dígalo usted, ¡que viva España!”.
Citados en Londres para la grabación de una nueva campaña de la marca de ginebra de la que son protagonistas Jones y Esteban, la llamada princesa del pueblo es proclamada lady Beefeater en una pequeña ceremonia en las instalaciones de la marca. “Me impresiona mucho su entusiasmo y su conocimiento de la ginebra. No me cabe duda de que será una lady Beefeater perfecta ya que demuestra todo el sentido de la diversión y el entusiasmo que evoca el estilo de nuestra ginebra”, asegura Payne sobre Esteban tras el nombramiento.
Belén Esteban y Xuso Jones en un momento del viaje a Londres.
Lo cierto es que Beefeater no podría tener mejor predicadora. Como la mayoría de ingredientes de esta ginebra son derivados de frutas y semillas, Esteban bromea con que es natural y que, por tanto, vale como ensalada: “Es como el biofrutas, ¿no? Por eso se conserva tan bien el Desmond… Ves, Miguel, es que todos los ingredientes son naturales, ¿cómo va a ser eso malo?”. A Belén también le acompaña en este viaje su marido, conocido como el Miguel, alguien a quien el gran público conoce muy poco a pesar de ser la pareja de una de las personas más reconocibles de España.
Es un hombre encantador en las distancias cortas. Pendiente de Belén y de todos, se le reconoce la familiaridad de trato que brindan tantos buenos profesionales de la salud. Él sigue trabajando como conductor de ambulancias, escenario en el que conoció a su pareja cuando acudió a atenderla en una emergencia. “El 5 de noviembre haremos 13 años juntos”, comparte ella durante una de las comidas del viaje. Se llevan unos 14 años, pero el moreno que trae ella y su vitalidad hace que no se note la diferencia de edad.
“En TEN tenemos libertad absoluta para comentar los temas. Me siento en familia, somos los de siempre”
Tras su fugaz paso por TVE1 asegura que está encantada de volver con No somos nadie : “Lo que más me gusta de trabajar en TEN es que tanto mis compañeros como yo tenemos libertad absoluta para comentar cualquier tema. Me siento en familia, somos los de siempre, con los que estoy muy cómoda y muy a gusto”. “Cada uno somos de nuestro padre y de nuestra madre y nos encanta el debate y discutir sobre nuestras diferentes perspectivas”, algo que no podían hacer con total libertad en la televisión pública.
Al día siguiente del rodaje en la destilería, durante el desayuno en el hotel, Esteban trata a otros huéspedes españoles con mucha cercanía. Alguien con tantas horas de televisión a sus espaldas sabe bien que la gente la reconoce al instante como una amiga. También se pone a cotillear como si su etapa de 14 años en Sálvame no hubiese acabado. Habla con mucho cariño de algunos personajes de actualidad. Que si María Patiño es muy amiga suya, que si ella no puede ir a Supervivientes por que es diabética, que si… “esto mejor no lo pongas”. De su hija, Andrea Janeiro, habla con mucha naturalidad y con el amor propio de una madre coraje, pero la joven eligió no ser un personaje público, y hay que respetarlo.
Belén Esteban, Xuso Jones y Desmond Payne durante la visita a la destilería.
“Yo me tiré 20 años hablando de Jesulín”, reconoce sin un ápice de timidez. Y al responderle que ahora es ella el personaje que se ha convertido en un icono en España, Esteban, poniendo esa media sonrisa con los ojos cerrados tan característica suya, replica: “Ya lo sé”. Lleva más de dos décadas protagonizando los programas más vistos de la televisión y apareciendo en las portadas de las revistas con más difusión del país. Aunque está más acostumbrada a desnudarse emocionalmente, en una ocasión posó para la portada de la desaparecida Interviú entre blondas negras muy trasparentes. Al recordarle esa curiosa portada, responde orgullosa: “Vendí más números que Marta Sánchez”.
