La salud del papa Francisco mejora, según el último parte médico difundido a las 19.30 horas del jueves. Según el comunicado, los análisis de sangre muestran una situación estable, no tiene fiebre y trabaja desde su habitación en el policlínico Gemelli.
El parte concuerda con las últimas apreciaciones procedentes de su entorno, que apuestan por una recuperación del Pontífice, después de 48 horas de estabilización al alza dentro de la complejidad de un diagnóstico como el de una neumonía bilateral y la bronquitis en una persona de 88 años.

El papa Francisco en su última audiencia en el Vaticano, el pasado 12 de febrero
Francisco lleva siete días ingresado en el hospital y, pese la opacidad de la situación en la que se encuentra, fue visitado la tarde del miércoles por la primera ministro italiana. Giorgia Meloni dijo que lo vio cansado, pero perfectamente lúcido.