El presidente de Rusia, Vladímir Putin, cree que los planes de Donald Trump respecto a Groenlandia deben considerarse en serio. En la sesión plenaria del VI foro Internacional del Ártico señaló, además, que estas aspiraciones no son “extravagantes”, ya que no son nuevas.
En opinión del jefe del Kremlin, “Estados Unidos continuará promoviendo sistemáticamente sus intereses geoestratégicos, político-militares y económicos en el Ártico”. Esta es una región estratégicamente importante para Rusia, dijo Putin, entre otros motivos por sus recursos, los conocidos y los que aún esconde el subsuelo.
El presidente ruso, Vladímir Putin, asistió el 27 de marzo en la ciudad ártica de Múrmansk a la botadura del submarino de propulsión nuclear 'Perm' (Sergei Karpukhin / Ap-LaPresse)
Trump sugirió una posible anexión
La cuestión de Groenlandia, una de tantas con las que en dos meses de presidencia Trump ha sorprendido al mundo, no tiene nada que ver con Rusia, aseguró Putin este jueves. Pero subrayó que Moscú está preocupado por el hecho de que los países de la OTAN a menudo “denominan el extremo norte como un campo de operaciones de posibles conflictos”. Washington tiene “planes serios” respecto a Groenlandia, avisó Putin.
Troels Lund Poulsen, ministro de Defensa de Dinamarca, uno de los 27 miembros de la Unión Europea, acusó este jueves al presidente de Estados Unidos de intensificar la controversia sobre Groenlandia y de lanzar “amenazas ocultas” con su deseo de hacerse con este territorio autónomo danés.
Horas antes, Donald Trump había reiterado en el pódcast conservador The Vince Show que Groenlandia es “vital” para la seguridad internacional y que “odiaba” tener que decirlo, pero su país va a tener que “hacerlo”, en referencia a una posible anexión de esta isla ártica.
Alaska como antecedente histórico
Las aspiraciones del inquilino de la Casa Blanca, que volvió a la presidencia de Estados Unidos en enero, “solo puede sorprender a alguien a primera vista”, explicó Putin en la sesión. “Es profundamente erróneo creer que se trata de conversaciones extravagantes de la administración estadounidense. Nada de eso”, aseveró el jefe del Kremlin este jueves en la sesión plenaria, que llevaba por título Ártico, territorio de diálogo.
De hecho, subrayó que las primeras ambiciones estadounidenses sobre ese territorio datan del siglo XIX. Y citó antecedentes históricos, enumerando varios intentos de EE.UU. de apoderarse de la isla, hoy un territorio autónomo de Dinamarca, uno de los países miembros de la Unión Europea.
Según el mandatario ruso, los primeros planes estadounidenses sobre Groenlandia datan de la década de 1860. Entonces, con menos de un siglo de historia como país independiente, EE.UU. consideró la posibilidad de anexionarse no solo Groenlandia, sino también Islandia.
Rusia, además, es uno de los países al que poco pueden sorprender las aspiraciones de Trump si echan un poco la vista atrás. Por esa época, en 1867, EE.UU. le compró al Imperio Ruso el territorio de Alaska, por el que pagó 7,2 millones de dólares de la época, o más de 11 millones de rublos.
Rusia aumentará el número de militares en la región del Ártico
Putin señaló que entonces esta adquisición se ridiculizó en Estados Unidos, y que luego la idea de ir a por Groenlandia no encontró apoyo.
El VI foro internacional Ártico se celebró durante el 26 y el 27 de marzo en Múrmansk, ciudad de la península de Kola donde se encuentra el mayor puerto de Rusia en el Ártico. En él se discutieron los problemas actuales del desarrollo de los territorios rusos del Ártico, así como los mecanismos más efectivos para compartir y desarrollar los recursos de la región.
Vladímir Putin aprovechó su presencia en este evento para confirmar la importancia estratégica del océano Ártico para Rusia. Y anunció que “el número de militares rusos crecerá” en esa región.
Una nueva ruta comercial
Alexéi Chekunkov, ministro de Desarrollo del Lejano Oriente y del Ártico, dijo que después de 2030 podría elaborarse un proyecto nacional dedicado al desarrollo del Ártico y de la ruta marítima del Norte, que gracias al deshielo de ese océano en las últimas décadas podría convertirse en una alternativa comercial viable y más económica que la que comunica Europa y Asia a través del canal de Suez.
Además de mejorar la infraestructura del transporte para desarrollar esta ruta, Putin aseguró que Rusia necesita también desarrollar la infraestructura para mejorar los asentamientos de la población. “Es necesario mejorar constantemente el entorno urbano (...) para que vivir en el Ártico sea realmente cómodo y atractivo”, subrayó el líder ruso.
Hay que mejorar la calidad de vida de las personas, lo que incluye la creación de empleos bien remunerados, el desarrollo de la educación y la medicina, agregó. Y, según él, es posible desarrollar la logística y los negocios, manteniendo al mismo tiempo “la protección obligatoria de los ecosistemas sensibles del Ártico”.