El primer ministro de Lituania, Gintautas Paluckas, ha presentado su dimisión en medio de un escándalo por posibles delitos financieros relacionados con su empresa privada. El dirigente, que llevaba en el cargo menos de un año tras ser elegido en las elecciones del pasado noviembre, ha comunicado su decisión ante el presidente de Lituania, Gitanas Nauseda.
El Servicio de Investigación de Delitos Financieros está investigando la empresa Dankora, propiedad de la esposa del hermano de Paluckas y dirigida actualmente por su sobrina. Al parecen, y según informan medios del país, esa compañía recibió presuntamente apoyo europeo y compró sistemas de baterías a la empresa participada por el primer ministro, llamada Garnis.
El presidente de Lituania pidió a Paluckas que se sometiera a una moción de confianza
El jefe de Estado de Lituania ha recibido esta mañana la llamada del primer ministro comunicando su decisión, después de haberle pedido recientemente que se sometiera a una moción de confianza en el Parlamento.
El presidente le había dado a Paluckas unas semanas para considerar su proceder, tiempo en el que la oposición al gobierno, el partido Unión de Demócratas ”“Por Lituania”, ha aumentado su presión amenazando al primer ministro de abandonar la coalición si este se mantenía en el cargo.
Paluckas encabeza un Gobierno de coalición tripartito liderando el Partido Socialdemócrata de Lituania, que ahora iniciará consultas sobre la formación de posibles coaliciones, según ha declarado el presidente del país.
Los escándalos financieros de Gintautas Paluckas
La empresa ahora en quiebra Garnis, participada por el primer ministro, recibió un préstamo preferencial de 200.000 euros del banco nacional de desarrollo cuando Paluckas ya encabezaba el gabinete de ministros. La investigación se centra en examinar el crédito para determinar si el primer ministro debía haber declarado un conflicto de interés.
Otra empresa gestionada por Paluckas, llamada Sagerta, recibió un préstamo de cientos de miles de euros de la compañía Uni Trading, pero no lo devolvió. Aunque Paluckas negó públicamente haber tenido relaciones comerciales con el empresario que le facilitó el crédito, Darijus Vilčinskas, este declaró haber invertido en la empresa del primer ministro.
El primer ministro Gintautas Paluckas
Posteriormente, se publicó una tercera investigación que en 2012, una empresa chipriota vendió a Paluckas un apartamento en el centro de Vilna a un precio bajo, en un terreno que el propio político había gestionado mientras era director de la Administración Municipal de Vilna.
Por último, salió a la luz que Paluckas pagó solamente 4.900 euros de una multa de 16.500 euros a la que fue condenado en un caso de abuso de autoridad en 2012, cuando era funcionario del Ayuntamiento de Vilna y contrató de forma irregular una empresa de control de plagas.
