Saül Martínez-Horta,neuropsicólogo, especialista en enfermedades mentales:

“Si ves a alguien repetirse en una conversación, ¡cambia de tema!”

Tengo 44 años. Soy de Barcelona. Soy neuropsicólogo. Vivo en pareja y tengo un hijo, Saül (4). ¿ Política? Decepción profunda. ¿ Creencias? No. Mi pasión, después del cerebro, es la práctica del surf y del windsurf: ¡me dedicaría profesionalmente a esto!. (Foto: Xavi Jurio)

¿De no ser neuropsicólogo, ¿sería surfista?

¡Me apasiona! Lo relaciono con mi estudio del cerebro.

¿Cómo es eso?

El cerebro es una máquina de hacer predicciones. Si predice un mar plácido, ver cumplida esa predicción ¡le da placer! Y es adictivo. Pero si la predicción se incumple... ¡mi cerebro se excita mucho!

Otra adicción: a los imprevistos.

Mi cerebro experimenta el mayor placer en el kilómetro previo a llegar a la playa: anticipa... Esto aborda la neuropsicología: los procesos y funciones cognitivas de tu sistema nervioso ante el entorno.

Reacciones, conductas...

Y enfermedades neurodegenerativas... Que millones de personas padeceremos.

¿Quiere asustarme?

No, pero mejor que lo sepa. Y que podemos convivir con la enfermedad neurodegenerativa, podemos navegar el alzheimer, parkinson, Huntington, priónicas...

¿Enfermedades priónicas?

Algunas proteínas devienen tóxicas y velozmente deterioran neuronas y mueres.

¿Enfermedades sin cura?

Sin cura, pero podemos vivirla con decente calidad de vida y toda la dignidad. Hasta llegar al final adecuado.

Su primer consejo sería...

Comprender dónde estás, el diagnóstico.

Un amigo me repite veinte veces la misma anécdota en una conversación.

Síndrome de perseverancia, se llama. No se lo reproche. ¡Ni le rebata, tampoco!

¿No?

Para él sería doloroso como para usted que yo ahora dijese: “No es usted Amela”.

Ya.

Él no sabe que se repite, ni que quizá alza la voz... Vive en su mundo, en una realidad en que él ni alza la voz ni se repite.

¿Qué debo hacer, pues?

Cambie usted de tema, lance otro señuelo conversacional, que así se desencallará.

Señáleme otros síntomas...

Hipersexualidad, acoso a una mujer... Debido al deterioro de la corteza prefrontal.

¿Nos convierte eso en sátiros?

Sátiros somos, animales, primarios, pero la corteza prefrontal –que anticipa consecuencias de los actos– filtra nuestra conducta primaria. Si el filtro decae...

Regresamos al mono.

Mientras la conducta no pase un límite...

¿Cuál es el límite, doctor?

La conducta que arriesgue la integridad física del paciente o de sus cercanos.

¿Y si se pisa esa línea, qué?

Farmacopea y psicología.

¿Drogamos al paciente?

Sí, con fármacos que no dejan al paciente alelado y con la baba colgando, ¿eh? Ajustan la alteración al punto en que el paciente es funcional en sus relaciones sociales.

Soy funcional actualmente, creo..., pero ¿y si noto algo raro, qué hago?

Hay retraso en los diagnósticos. Un paciente notó que le costaba encontrar palabras, me consultó... “¿Cómo se enciende una cerilla?”, le pregunté. Y no supo hacerme este gesto que usted me hace...

¿Qué le sucedía?

Vi que no es que olvidase palabras, ¡es que estaban borrándosele conceptos! El concepto cerilla se le había borrado.

¿Tiene nombre esa enfermedad degenerativa?

Afasia progresiva primaria: la afección del famoso actor Bruce Willis.

Una tía mía decía: “Cada noche me entran marcianos por el balcón”.

Trato a personas así: llegan a creer que toda su familia se ha confabulado con los intrusos, con el fin de robarle o dañarle.

¿Qué aconseja, doctor, en este caso?

Hacerle notar al paciente que estos visitantes no le han hecho nunca daño, que son del todo inofensivos. ¡Sufrirá menos!

Se trata de no discutir para no sufrir.

Sí, siempre que a los familiares cuidadores todo esto no les haga la vida imposible: en ese caso aconsejo institucionalización.

Todo está aquí en el coco, ya veo.

El cerebro es probabilístico, para mal y para bien: por ejemplo, hay personas con poca vista que se espabilan porque su cerebro ve con arreglo a todo lo ya visto.

¿El cerebro construye su particular percepción de la realidad?

Tal cual. Incluidas realidades amputadas: murió mi gato y durante tiempo le oí maullar, un sonido ambiente era percibido como maullido de mi fallecido gato.

¡Esta función cerebral explicaría los fantasmas, entonces!

Claro. Y por qué ves u oyes a personas muertas. Los navegantes solitarios ven aparecerse en cubierta a seres queridos.

Resuma la enfermedad mental, doctor.

Una pérdida sucesiva de cosas desde el diagnóstico a la muerte, un duelo por etapas... Que puede vivirse con dignidad.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...