La decana del Col·legi Oficial de Treball Social de Catalunya (TSCAT), Laura Morro, constata que diferentes municipios de Catalunya, tanto del área metropolitana de Barcelona, como de localidades más alejas del Vallès Oriental, el Vallès Occidental o de Osona, derivan a Barcelona a personas sin hogar. Morro afirma que los ayuntamientos incluso pagan el billete de bus o tren hasta Barcelona de estos ciudadanos sin recursos, según adelantó ayer Catalunya Ràdio.
El Ayuntamiento de Barcelona ya hace tiempo que alerta de que ciudades vecinas envían a la capital a hombres y mujeres sin hogar. En los últimos meses se han rozado las 1.600 personas que duermen en la calle, un 20% más que un año atrás, según las cifras que maneja la Guardia Urbana y los equipos municipales de calle. Precisamente esta noche, la fundación Arrels realizará un recuento de los ciudadanos que pernoctan a la intemperie en todos los distritos de la ciudad.
El área de Acció Social del Ayuntamiento explica que cuando los servicios sociales identifican situaciones de vulnerabilidad de personas llegadas de otros municipios exploran “hasta qué punto el hecho de venir a Barcelona responde a su libre ejercicio del derecho de movilidad”. En el caso de que haya sido derivadas de otras ciudades “entendemos que por corresponsabilidad tenemos que hacer la gestión pertinente con el municipio de referencia”, indican desde Acció Social.
“Muchas compañeras trabajadoras sociales en municipios que no tienen centros de baja exigencia para ciudadanos sin hogar tienen la consigna de derivarlos a Barcelona, pero esto supone trasladar el problema de un lugar a otro, es necesaria una estrategia de país”, remarca Laura Morro.
El incremento de personas sin hogar ha ido en aumento en Catalunya, aunque no se dispone de cifras actualizadas, tal como dejó patente ayer lunes el Comité de Expertos para la Transformación y la Innovación Social (Cetis) en la presentación del informe Estrategias contra el Sinhogarismo , encargado por el Departament de Drets Socials i Inclusió de la Generalitat. La falta de datos fiables impide hacer un buen diagnóstico de la situación y emprender soluciones.
“Barcelona no puede acoger a todas las personas sin hogar de Catalunya”, añade Morro. La capital también está al límite y ya hace tiempo que reclama a la Generalitat que asuma el liderazgo en este tema. El Cetis también hizo hincapié en la necesidad de que los diferentes departamentos de la Generalitat se coordinen.
Trabajadoras sociales de otros municipios tienen la consigna de enviar a personas sin hogar a la capital
Drets Socials i Inclusió asume las recomendaciones fijadas en dicho informe, tal como manifestó el lunes la consellera Mònica Martínez Bravo, y se compromete a trasladar estas inquietudes al Parlament de Catalunya para que se incluyan en la proposición de ley de medidas para hacer frente al sinhogarismo, que avanza al ralentí.


