Las Claves
- Los locales de Enric Granados recuperan su horario habitual tras no apelar el Ayuntamiento de Barcelona el reciente fallo judicial.
- Las terrazas podrán abrir hasta las
Los espacios exteriores de los locales en la calle Enric Granados ya no estarán obligados a finalizar su actividad una hora antes que los demás veladores de Barcelona. El Gremi de Restauración local comunicó este martes que el fallo judicial que autoriza a dichos negocios del barrio de la Dreta del Eixample a retomar su horario ordinario ya es definitivo, dado que el Ayuntamiento no presentó apelación alguna en el plazo establecido. De este modo, tienen permitido operar nuevamente hasta las doce de la noche los días laborables y hasta la una de la mañana los viernes, sábados y vísperas de festivos.
Nos referimos a un núcleo de esparcimiento clave donde en escasos 900 metros del Eixample se agrupan 117 negocios con permisos localizados en 114 fincas con residentes. Desde hace tiempo, múltiples asociaciones de barrio critican que las faltas a la normativa por parte de bastantes hosteleros son muy comunes. En el 2022, la gestión de la por aquel entonces alcaldesa Ada Colau acortó en una hora el funcionamiento de estas terrazas.
No obstante, el Gremi de Restauració rechazó en todo momento que en aquel periodo se sobrepasaran los decibelios autorizados o que hubiera una protesta real por parte de los residentes. Informantes vinculados al Gremi sostienen que “la documentación suministrada por el Ayuntamiento al amparo de la Ley de transparencia permitió constatar que el volumen de quejas era menor al que referían los informes municipales y que la mayoría de las reclamaciones provenía de un grupo muy reducido de residentes”.
Durante el pasado periodo reciente, los veladores situados en las plazas del Sol y de George Orwell, en la Vila de Gràcia y en el barrio Gòtic, al igual que los de las calles Ferlandina y Blai, en el Raval y el Poble Sec, retomaron sus jornadas de apertura comunes después de que los tribunales anularan las medidas de limitación del ayuntamiento establecidas mayormente por los gobiernos de Colau. Dichos recortes, no obstante, todavía se mantienen activos en diversos puntos, tales como el Triángulo Golfo o la plaza de la Virreina.


