“Una manada”, la carta de la madre de una árbitra de 13 años acosada en un partido de fútbol en Galicia

Intimidación en el campo

“No voy a callarme porque eso solo encubre un problema que muchas veces se oculta por vergüenza. Si no denunciamos estos hechos, seguirán repitiéndose con total impunidad”, escribió en su cuenta de Facebook

Esther Rey, madre de la árbitra, decidió hacer pública la situación para visibilizar este tipo de actitudes y evitar que sigan ocurriendo

Esther Rey, madre de la árbitra, decidió hacer pública la situación para visibilizar este tipo de actitudes y evitar que sigan ocurriendo 

Pixabay

Una madre de A Coruña ha denunciado en redes sociales el acoso que sufrió su hija, una árbitra de tan solo 13 años, durante un partido de fútbol prebenjamín entre el Victoria y el Silva en los campos de A Torre (A Coruña). Según ha informado Antena 3, la joven colegiada vivió una situación de extrema presión debido al comportamiento de algunos adultos en el encuentro.

Esther Rey, madre de la árbitra, decidió hacer pública la situación para visibilizar este tipo de actitudes y evitar que sigan ocurriendo. “No voy a callarme porque eso solo encubre un problema que muchas veces se oculta por vergüenza. Si no denunciamos estos hechos, seguirán repitiéndose con total impunidad”, escribió en su cuenta de Facebook.

“Discutió constantemente todas y cada una de sus decisiones, intimidándola con gestos exagerados y un tono desafiante”

En su relato, destacó que los entrenadores de ambos equipos mantuvieron una actitud correcta dentro de lo que calificó como un ambiente “agresivo y maleducado”. Sin embargo, señaló al delegado del Victoria como el principal responsable del acoso a su hija. “Discutió constantemente todas y cada una de sus decisiones, intimidándola con gestos exagerados y un tono desafiante, a pesar de que es solo una niña que, al igual que los jugadores, está aprendiendo”, denunció.

La madre no dudó en calificar de “inaceptable” el comportamiento de este adulto y reclamó su expulsión de los terrenos de juego. “Está creando a su alrededor un ambiente hostil, inculcando su actitud a los más pequeños. En el descanso, un niño de apenas 7 años se acercó a mi hija exigiéndole explicaciones por su arbitraje, cuando lo que debería aprender es que las decisiones del árbitro no se cuestionan”, explicó.

La presión sobre la joven árbitra no se limitó a una sola persona. Según la madre, en el banquillo del Silva había “un entrenador y tres jóvenes que actuaban en grupo para cuestionarla y acosarla tras cada decisión”. La tensión llegó al punto de que la niña evitaba acercarse a la banda porque sentía miedo ante la actitud agresiva de los allí presentes.

Lee también

Esther Rey lamentó que su hija no activara el protocolo de violencia verbal, que le habría permitido sancionar y expulsar a quienes la estaban acosando. “Tendría que haber sacado tarjetas y expulsado a los tres sinvergüenzas del banquillo del Silva, pero estaba desbordada”, afirmó. Con su denuncia, espera que estas situaciones no vuelvan a repetirse y que se proteja a los jóvenes árbitros de este tipo de abusos.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...