Una tortuga boba ha nidificado en la playa de Sant Feliu de Guíxols (Girona) con 101 huevos.
Un operario que realizaba labores de limpieza de la arena ha visto a la tortuga y ha alertado a los servicios de protección de fauna.
Los expertos se han desplazado hasta el lugar para identificar a la tortuga y realizar su seguimiento antes de que volviera al mar. Elena Abella, Centre Tecnològic Beta de la Universitat de Vic, ha detallado que se ha señalizado el nido con un cercado y carteles y existe una red de voluntarios para protegerlo durante el periodo de incubación: “En un mes y medio sabremos si la puesta es viable”. Es el primer nido detectado este verano en la Costa Brava y es la segunda vez que la tortuga careta nidifica en el litoral gerundense. La primera vez fue en Begur en el 2023.
“Hasta aproximadamente dentro de un mes y medio no sabremos si los huevos están fecundados o no y, por tanto, debemos ser prudentes. Pero esperamos que así y sea y puedan nacer muchas tortuguetas aquí, en Sant Feliu de Guíxols”, ha afirmado Abella que remarca que ya es todo un hito que el tortuga carita haya. nido detectado esta temporada de cría en Catalunya, el primero lo localizaron el pasado fin de semana en el Delta del Ebro.
Además, el Departament de Territori, Habitatge i Transició Ecològicaremarca que es la segunda vez que la tortuga careta nidifica en la Costa Brava. La primera vez lo hizo en Begur en el 2023.
Hacia las cinco de la mañana, un operario de Sant Feliu de Guíxols que realizaba trabajos de limpieza en la playa ha visto a la tortuga.
Abella remarca que el trabajador se ha dado cuenta de la importancia y ha alertado a los servicios de protección de fauna. A partir de ahí, han activado el protocolo de seguimiento de nidificación que coordina el Departamento y del que forman parte los Agentes Rurales, el Centro BETA y la Fundación CRAM. En Sant Feliu, han contado con el apoyo del Ayuntamiento.
Los expertos que se trasladaron hasta el lugar pudieron comprobar que el nido tiene 101 huevos, que se mantendrán todos en la playa al considerar que reúne los requisitos necesarios para el período de incubación. Cuando llegaron allí, además, pudieron colocar un dispositivo de seguimiento satelital y un chip en la hembra. Luego, la tortuga ha vuelto al mar.
Protección entre 50 y 60 días
Durante los próximos 50-60 días, hasta mediados de agosto, el nido estará protegido con un cercado de protección y carteles informativos. El Servicio de Fauna y Flora de la Generalitat también cuenta con una red de voluntarios que podrían hacer custodia si fuera necesario, ha explicado Abella, quien añade que también es importante hacer pedagogía entre la población para que sepa cómo actuar en caso de detectar un nido o una tortuga en la arena.
“Es muy importante no molestarla, no pisar el rastro y llamar rápidamente al 112 para poder avisar al personal experto para gestionar el nido de forma correcta”, ha remarcado.