La Bisbal d'Empordà hará cerrar las tiendas de comestibles y bebidas del centro de la ciudad a partir de las 21.30 horas para combatir el incivismo. Personas, sobre todo jóvenes, en torno a tiendas de comestibles pequeños, y esto ha generado quejas de vecinos y peatones por gritos, suciedad, obstrucción del paso a las aceras o peleas. Una vez firmado el decreto de alcaldía sobre los horarios comerciales, existe un plazo de información pública para presentar alegaciones.
Hay veinte días hábiles de información pública y un trámite de audiencia de diez días hábiles para que los titulares de los establecimientos puedan presentar las alegaciones o consideraciones que crean necesarias.
Lee tambiénLos retos municipales pendientes en el ecuador del mandato
En el comunicado, el equipo de gobierno expone que el informe del jefe de la Policía Local que acompaña al decreto ya proponía como medida “complementaria y coherente con los objetivos de convivencia” establecer un horario de cierre máximo de las 21.30 horas para los establecimientos comerciales de la zona centro, en línea con el resto de supermercados del municipio.
“Esta medida tiene como finalidad reducir el atractivo nocturno de estos espacios, dispersar la afluencia tardía de grupos y mejorar la percepción de seguridad y bienestar del vecindario, garantizando el derecho al descanso ya una convivencia equilibrada”, recogía el informe.