Unió de Pagesos ha dado el pistoletazo de salida este viernes a su decimocuarto congreso nacional, que se celebra hasta el domingo en el Teatro L'Amistat de Mollerussa (Lleida) y que lleva por lema 'Hagamos el trabajo'.
El sindicato agrario se marca el objetivo durante estos tres días de debatir y decidir el rumbo político y organizativo del sindicato para organizar “la lucha del campesinado para la próxima década”, ha explicado su coordinador nacional, Joan Caball.
El congreso también prevé una importante renovación, puesto que después de 25 años liderando el sindicato, Caball deja el cargo. La nueva comisión permanente se presentará el domingo al mediodía.
El congreso reúne, entre el viernes y el domingo, a 146 delegados de todas las comarcas para poner a debate tres ponencias: de organización, de política agraria y otra para que la tierra y el agua sean consideradas valores de país. Durante estos tres días el sindicato se marca el objetivo de organizar la lucha campesina de los próximos años.

146 delegado participan en el congreso de Unió de Pagesos.
El congreso es el máximo órgano de Unió de Pagesos, que se celebra cada cinco años y elige a los miembros de la comisión permanente nacional, los coordinadores territoriales, el síndic del afiliado y la comisión de garantías estatutarias.
Unió de Pagesos, con 6.000 afiliados, es el sindicato agrario mayoritario del campo catalán, ya que en las últimas elecciones agrarias de 2021 obtuvo el 65% de representatividad en los órganos de interlocución consultivos y con el Govern.
Entre los debates, el sindicato agrario pondrá sobre la mesa propuestas para seguir haciendo frente a los intereses económicos sobre los principales factores de producción de la agricultura que amenazan con desplazar al campesinado. También tratará la defensa de instrumentos para regular el mercado de la tierra agraria, como el control de precios en la compra y el arrendamiento de tierras para evitar precios especulativos, la creación de un fondo autónomo de tierras y derechos agrarios y la urgencia de activar el acceso a tierras en desuso.
Por lo que respecta al agua, defenderá la prioridad del uso agrario respecto a otros usos como base de la seguridad alimentaria, así como el impulso de la modernización de los regadíos, la evaluación de la implantación de riegos de apoyo en las zonas de secano, y la defensa de la financiación pública de infraestructuras de regadíos.
En política agraria, el sindicato propone mecanismos para garantizar precios justos como el cumplimiento y mejora de la normativa de la cadena alimentaria. También recoge numerosas propuestas para reducir costes de producción; conseguir que el Gobierno apruebe en 2025 la ley de gestión sostenible de la fauna cinegética y el plan sectorial agrario, y que se asegure el cumplimiento del acuerdo para la simplificación administrativa.
En la inauguración del 14 Congreso ha participado el presidente del Parlament, Josep Rull, que ha destacado la trayectoria “rotunda” del sindicato a lo largo de sus 50 años de historia y ha remarcado, también, el papel “estratégico” del sector agroalimentario para poder hacer frente a los “grandes retos” del país y globales como, ahora la “lucha”.
También ha intervenido representantes de los partidos políticos con representación en el Parlament, quienes han remarcado el papel destacado del sindicato en sus años de historia y han reclamado la necesidad de trabajar para que el sector tenga un trato justo y para poder facilitar la incorporación de jóvenes al sector y evitar el abandono del oficio y para que el sector.