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Varias denuncias por abusos sexuales a dos menores en un centro de acogida de Madrid

Violencia

La unidad policial de Atención a la Familia y a la Mujer investiga las agresiones vividas por las dos chicas

Un agente de la Policía Nacional en un ordenador haciendo investigaciones.

POLICÍA NACIONAL / Europa Press

Dos menores de edad han sufrido abusos sexuales, y hasta presuntas violaciones, en el centro de acogida Hogar San Mateo, que pertenece a la Asociación de Intervención y Desarrollo Abrazo y gestionado por la Comunidad de Madrid, según publica Elplural.com

La Policía Nacional de Madrid ha confirmado a La Vanguardia “que hay varias denuncias puestas sobre estos casos” a finales del año pasado de abuso a menores. Según los hechos que hasta ahora han salido a la luz pública, varios trabajadores del centro pusieron denuncias en la policía por “supuestas violaciones y abusos sexuales a dos residentes” perpetrados por cinco residentes de manera individual y continuada. 

La dirección del centro ocultó los hechos

Según recoge el citado medio online “el director del centro presuntamente ya conocía los hechos y los silenció durante más de un año”. 

Los agresores están siendo investigados por la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (Ufan), que pertenece al citado cuerpo policial. De ellos, solo  uno sigue viviendo en el centro por ser aún menor de edad en el momento de la denuncia, con lo que continua conviviendo con las dos víctimas  en el mismo hogar. El resto, al haber cumplido los 18 años, ya no residen en dicho centro de la Comunidad de Madrid.

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Los abusos, según relatan trabajadores del centro, arrancan del año 2023, pero la dirección del centro “miro para otro lado” y fueron educadores y trabajadores sociales de dicha residencia “los que emprendieron el camino legal para denunciar los presuntos abusos”. Según extrabajadores del centro, el propio director del centro trató de disuadir a las menores de compartir lo que estaba sucediendo.

Tras la denuncia, la única medida que ha debido tomar la Comunidad de Madrid es enviar a un inspector de trabajo “para cumplir el protocolo” y dejar todo en manos de la investigación policial. Además, desde la dirección del centro no han cursado una orden de alejamiento del joven que aún vive en dicho centro de acogida respecto a las dos menores. Este periódico ha tratado varias veces de ponerse en contacto telefónico con el portavoz de la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, pero ha resultado imposible.