La consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, que dirige Fátima Matute, ha ignorado un total de 30.000 reclamaciones puestas por los ciudadanos en el 2024, según la plataforma Vecinas y Vecinos de Barrios y Pueblos de Madrid.
”Ignorar la voz de 30.000 personas que piden ayuda evidencia una falta de responsabilidad moral y política absoluta”, señala un portavoz de la iniciativa.
Quejas al alza
En el 2023, hubo 34.694 reclamaciones, pero esta cifra se disparó hasta las 78.703 el año pasado, lo que supone un incremento del 127%.
Las quejas se centran en cuatro campos. Por un lado, demoras en la atención primaria. En este sentido, la media para conseguir cita es de 7 días, cuando la media nacional es de 6 días, muy lejos de los protocolos de 3 días de la Consejería. Además, reclaman que medio millón de personas no tienen médico de familia asignado.
Por otro lado, también, recuerdan que hay 281.000 niños y niñas sin pediatra asignado.
En este contexto de situación precaria que atraviesa la sanidad madrileña, desde esta plataforma recuerdan -como tercer problema estructural- que en las urgencias extrahospitalarias de zonas urbanas y rurales, en un 40% de los casos no hay médico de cabecera. Y para colmo, el último gran problema es que más de un millón de personas esperan pruebas diagnósticas, consultas con especialistas o cirugías.
